Pujol critica que Maragall cambie de opinión y apoye ahora el trasvase del Ebro a Barcelona

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, no dudó ayer en convertir el trasvase de agua del Ebro hacia Barcelona en arma arrojadiza no sólo contra Pasqual Maragall sino contra la propia Plataforma en Defensa del Ebro, en la que la postura del PSC de apoyar un trasvase de agua hacia el norte en casos de emergencia ha generado las primeras grietas: "Primero dicen que sí, luego que no lo necesitan y ahora que sí otra vez", aseguró un Pujol dispuesto a ahondar en la grieta. El dirigente nacionalista, de visita en las tierras del Ebro, escuchó ayer nuevamente gritos de "traidor" y "sinvergüenza" proferidos por centenares de militantes de la Plataforma, contrarios al Plan Hidrológico Nacional suscrito por PP y CiU.

Pujol no habló del trasvase de mayor volumen, que derivará agua hacia Valencia y Murcia, sino de la interconexión de las cuencas catalanas del Ter, el Llobregat y el Ebro, que los socialistas apoyan en casos de emergencia y que la Plataforma en Defensa del Ebro rechaza de plano: "Con la boca pequeña dicen sí a la interconexión de cuencas", afirmó el presidente, que calificó la postura de Maragall de errática; "no dice lo mismo en Vinaroz que en Tortosa, o en Ulldecona y Alcanar. Maragall es muy errático, en eso y en todo". Pujol enfatizó el trabajo realizado desde su Gobierno para que "el crecimiento industrial y urbanístico haya superado el Coll de Balaguer". Los militantes antitrasvase esperaron al presidente de la Generalitat en L'Aldea y en Tortosa, donde inauguraba las obras de la variante y pronunciaba una conferencia económica, respectivamente. Armadas de cacerolas, centenares de personas abuchearon a los cargos políticos convergentes y populares.

El ministro y portavoz del Gobierno, Eduardo Zaplana, aseguró que las declaraciones realizadas ayer por el secretario general del PSC, Pasqual Maragall, en las que manifestó que no enviaría "ni una gota de agua" a Levante por el mal uso que harían de la misma, demuestran su "concepto de la solidaridad", y preguntó a los socialistas de la Comunidad Valenciana y de Murcia si están de acuerdo con esta afirmación.

Por otra parte, el PSOE protestó ayer ante el Consejo de Administración de RTVE por la cobertura que la cadena pública ha dado a la polémica por las declaraciones de Maragall en el telediario que dirige el periodista catalán Josep Puigbó. Las palabras de Maragall ni siquiera fueron traducidas. Anna Balletbó, miembro de este consejo, ha pedido que en la próxima reunión del organismo se visione la citada información.