Una Vitoria más culta

No cabe duda de que en Bilbao existe un antes y un después del Museo Guggenheim y el Palacio Euskalduna o de que San Sebastián se ha revitalizado con la construcción de los cubos del Kursaal. Vitoria intentó ponerse a la altura con el Artium, un edificio más modesto, puesto al servicio de la importante colección artística de la Diputación alavesa. También la reforma de la Catedral de Santa María ha servido para atraer al turismo, pero ambos se sienten aún insuficientes para dar un salto cualitativo. Se busca algo más.

Ambos proyectos nacieron durante los anteriores gobiernos nacionalistas en las instituciones locales. El Partido Popular ha querido dejar su propio sello. El alcalde de Vitoria, Alfonso Alonso, tenía una fijación particular con una parcela sita junto al paseo de La Senda, no lejos de Ajuria Enea, frente a las actuales vías del ferrocarril, que desaparecerán con el futuro soterramiento. En el pasado mandato presentó su idea: construir un auditorio, bautizado como Palacio de la Música y las Artes Escénicas.

No le ha faltado tesón, porque se ha encontrado con múltiples reticencias. En primer lugar, las de quienes dudaban de la necesidad de una infraestructura así, visto que el mayor teatro de la ciudad, el Principal, no llena su aforo en buena parte de su programación. También se discutió la ubicación. La oposición municipal prefería un solar menos céntrico, frente a la sede central del Gobierno vasco, en Lakua.

Alonso siguió con su idea fija. Promovió un concurso internacional para diseñar el edificio, que ganó el arquitecto Juan Navarro Baldeweg con una caja de 31 metros de altura, donde predomina el cristal gris en el exterior y con dos salas (una de 1.500 butacas y otra de 500).

Con el dibujo ya aprobado, ahora el Ayuntamiento espera presentar la próxima semana el proyecto básico, el que definirá de una manera concreta cuánto puede costar el auditorio. El primer edil dio ayer otro pequeño paso en este largo proceso. En una reunión con la consejera de Cultura, Miren Azkarate, ultimó los preparativos para firmar un convenio por el cual el Gobierno vasco aportará 741.000 euros para financiar la redacción del proyecto arquitectónico. Además, arrancó buenas palabras de Azkarate, con quien no siempre ha existido la misma sintonía. "Es un proyecto realista, con cantidades bien ajustadas. Se está haciendo un trabajo riguroso y serio", comentó la consejera.

Cultura dará a conocer este mes su Plan de Infraestructuras para 2004-2007. El Ejecutivo aportará su parte al auditorio recurriendo a ese fondo. El Gobierno central ya ha asegurado que apotará una cuarta parte del costo. Navarro Baldeweg, optimista, ha asegurado que a finales del año próximo estará en condiciones de empezar las obras, para acabarlas en 2006.

Al proyecto estrella del auditorio se unen otros. El Museo de Arqueología (unos seis millones de euros) se construirá a partir de finales de este año. Cuando se termine, se acometerá el traslado del Museo de Ciencias Naturales (aún sin definir), cuya financiación todavía no se ha precisado por completo.