La juez del 'caso CPV' cita a un interventor y al padre de uno de los imputados
La juez suplente del Juzgado de Instrucción 34 de Madrid, Mercedes Gutiérrez, encargada de investigar la presunta estafa inmobiliaria que la Comercializadora Peninsular de Viviendas (CPV) ha cometido en tres nuevos barrios del norte de Madrid, tomará declaración hoy al padre de uno de los imputados en la causa, que gestionaba los sueldos, y a un interventor de Caja España.
A partir de las diez de la mañana comparecerá ante la magistrada Javier F. P., empleado de la citada entidad bancaria en la que CPV abrió cuentas especiales con el dinero que unas 1.200 familias les fueron entregando durante cuatro años para la adquisición de una vivienda. Dichas cantidades han desaparecido. Según fuentes jurídicas, el testigo deberá certificar la existencia de dichas cuentas, así como los movimientos que se produjeron en ellas mientras permanecieron abiertas. Las cantidades que había en estos depósitos sólo podían ser utilizada para la adquisición de los terrenos en los que CPV tenían que construir las casas para sus clientes. Las mismas fuentes indicaron que el compareciente debe conocer si hubo salidas de dinero de estas cuentas y hacia qué vías. Además, según estos medios, los bancos podrían tener responsabilidad en la comisión de la presunta estafa, "pues eran los guardianes del dinero de los clientes de CPV".
Tras este testigo, la juez tomará declaración a Ángel Morillo, padre de Miguel Ángel Morillo, administrador de la promotora e imputado junto al director general, Francisco García Moreno, y a los dos hijos de éste, Miguel Ángel y Francisco Javier, en el caso CPV. Morillo trabajaba para la empresa investigada en el departamento de gestión del suelo, aunque en ningún momento ha estado imputado en la causa.
