El Valladolid, sólo de penalti

El Valladolid se llevó la primera victoria de la temporada con un solo disparo entre los tres palos en todo el partido. Ese tiro fue el del penalti que convirtió Jesús en gol al final de la primera parte.

Fernando Vázquez debutó en Zorrilla en un partido espantoso que sólo se abrió cuando el Málaga tuvo que echarse al monte y Juande Ramos dejó a su equipo con tres defensas en el campo. Hasta ese momento, los dos conjuntos habían dejado pasar el tiempo perdidos en un equilibrio de fuerzas tan grande que todo apuntaba al combate nulo como resultado final. Sin embargo el Valladolid supo, con la velocidad de Sousa, que el chollo del rival era la lentitud de Fernando Sanz. En la primera carrera entre los dos, el remate se fue por encima de Arnau. La segunda la provocó un error del propio Sanz y terminó en un agarrón a Sousa cuando ya estaba solo delante del portero.

El gol de Jesús marcó todo lo que hicieron unos y otros en la segunda parte. Vázquez decidió obstruirlo todo y añadió un central y más control en el centro del campo. Ramos puso todo lo que tenía e incluso retiró a Sanz para añadir kilos en la línea media y la delantera. El resultado fue el contrario al pretendido porque el Valladolid comenzó a encontrar huecos donde antes sólo había piernas rivales.

Pero el músculo del Valladolid, lo ha avisado su entrenador, es todavía débil y terminó rodeando a su portero. El Málaga generó ocasiones, pero, con Salva pendiente de debutar, Alonso en el banquillo después de pasarse más de media hora perdido en la banda izquierda y Geijo, un canterano, como única solución de área, su gol no llegó.