Ausencia de presiones

La estabilidad de que han hecho gala las cotizaciones a lo largo de todo el mes de agosto ha servido de aliciente en esta esta sesión con la que, de forma extraoficial, se abre el nuevo curso. Las constantes afirmaciones de los analistas respecto de la disminución en la percepción de riesgos en las bolsas empiezan a calar en el ánimo de los inversores, lo que se está traduciendo en una reducción significativa de las presiones vendedoras.

Los inversores, no obstante, siguen escatimando el dinero, pero confían en la solidez del mercado, sobre todo después de comprobar que son mayores las probabilidades de marcar máximos que de romper los soportes. Las pocas cotizaciones que mostraban beneficios después de un mes de casi estancamiento del mercado apenas se han visto afectadas por las realizaciones, con lo que se mantiene el juego de rotaciones a muy corto plazo que tan buenos resultados ha dado en estas últimas semanas

El Ibex 35 terminó la jornada con un avance del 1,17% y muy cerca del nivel de los 7.200 puntos, mientras que el índice general de la Bolsa de Madrid ganaba el 1,24% para cerrar en 759,19 puntos.

La tranquilidad con que los inversores han encarado esta sesión tiene mucho que ver con el cierre de los mercados estadounidenses, al ser jornada festiva. Esto explica en parte que el avance general de las cotizaciones no haya llegado acompañado de una mejora en la contratación, que alcanzó los 1.117,86 millones de euros en el Mercado Continuo.

La actividad institucional creció respecto de las últimas sesiones, con algo más de 300 millones de euros. Entre estas operaciones destacaba una por 26,65 millones de acciones del BBVA.

Los mercados europeos también disfrutaron de la ausencia de presiones por los habituales bandazos de Wall Street y terminaron el día con avances que superaron el 1%. La Bolsa de París ganó el 1,42%; la de Londres, el 1,04%, y Francfort subía el 2,44% poco antes de concluir la jornada.