De la farola a la playa
Iniciativa recicla el material de la campaña electoral de Imma Mayol y obtiene 1.000 bolsos de las pancartas
Después de cada campaña electoral, los carteles publicitarios de los partidos pidiendo el voto dejan de tener sentido. Se convierten en toneladas de basura.
Pero esta regla empieza a tener excepciones: los carteles electorales de Imma Mayol siguen por Barcelona, tres meses después de los comicios. Hoy, sus ojos penetrantes ya no piden el voto para Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) desde una farola, sino que acompañan a algunos bañistas. El cartel electoral se ha convertido en un bolso ideal para ir a la playa.
ICV es el primer partido que recicla parte de su material de campaña, inspirándose en una conocida empresa que en los últimos meses ha popularizado una serie de complementos -básicamente bolsos- elaborados a partir de lonas publicitarias. Las pancartas y lonas electorales de Imma Mayol no se han convertido en escombros, sino en bolsos.
Todos los bolsos -de 30 por 37 centímetros- son distintos: algunos aprovechan la cara u otras partes del cuerpo de la candidata; otros destacan fragmentos del eslogan electoral -D'esquerres i ecologista de debò-. Lo único que tienen en común es la textura y su sencillez: no son más que trozos de lona plastificada y cosida.
Con el material utilizado en la campaña, Iniciativa ha conseguido elaborar 1.000 bolsos. Por cada uno ha pagado en torno a 4,5 euros (750 pesetas) y los vende a 6 euros. El objetivo, no obstante, no es ganar dinero puesto que buena parte del producto se repartirá entre las mismas agrupaciones de la formación.
El coordinador de la pasada campaña electoral, Jordi Guillot, explica que el partido ha decidido reutilizar el material para "predicar con el ejemplo", puesto que Iniciativa ha hecho del ecologismo uno de los puntales de su ideario. Pero no es éste el único motivo: "También es una forma de mantener viva una campaña muy querida por todos porque los resultados fueron excepcionales", añade Guillot. En las últimas elecciones, ICV pasó de dos concejales a cinco en Barcelona. El dirigente ecosocialista todavía subraya una tercera razón: el deseo del partido de crear y difundir una imagen corporativa que vaya más allá de cada elección.
