Vigilantes de la bahía
Ursat diseña y comercializa boyas para analizar la calidad de las aguas
En los tiempos que corren son los mejores vigilantes de la playa, ya que trabajan las 24 horas sin descanso enviando información en tiempo real sobre el análisis bacteriológico de las aguas en las que flotan. Se trata de las boyas telecontroladas.
En realidad, la máquina se llama Boya Analítica Tele Controlada Bat21, y la empresa que la ha diseñado, perfeccionado y puesto en las redes comerciales se llama Ursat Comunicaciones y Servicios. De momento, la bahía de Cádiz dispone ya de varias y ha contratado más de última generación, y la bahía de San Sebastián dispone de una para garantizar la calidad del baño.
La empresa, fundada en 1995, puso en funcionamiento la primera de las boyas analíticas telecontroladas Bat21 en julio del año pasado
Ursat ha instalado en la bahía de Algeciras un sistema para detectar vertidos de hidrocarburos antes de que las manchas lleguen a la playa
La empresa, fundada en 1995 como una filial de investigación aplicada del grupo Ursat (dedicado a depuradoras y sistemas de telecomunicaciones y control por satélite), puso en funcionamiento el primero de los aparatos en julio del pasado año. En los últimos 12 meses ha mejorado las prestaciones del ingenio, asegurando con energía solar el funcionamiento ininterrumpido, y ahora comienza su lanzamiento comercial. "Tenemos una ventaja fundamental, y es que no existe un producto como el nuestro en todo el mercado. Casi podemos asegurar al 100% que ninguna boya ofrece nuestras prestaciones y sistemas de comunicación y análisis", asegura el director comercial, José Ángel Martín Dueñas. Ursat tiene 19 personas en plantilla, 15 de ellas en Vitoria y el resto en Sevilla, y la mayoría son ingenieros y técnicos.
La primera boya que la firma alavesa puso en el mercado, en julio de 2002, estaba alimentada por pilas y realizaba el análisis físico-químico del agua en la bahía de la Concha, en San Sebastián. Los datos los enviaba vía radio al centro de control instalado en el Acuárium y de ahí se repartían vía satélite a la sede de Ursat en Vitoria. Poco a poco han ido incorporando nuevos sensores para analizar nutrientes, clorofila y detección de hidrocarburos.
El proyecto Simcaba
Con ese precedente, Ursat instaló en la bahía de Algeciras un sistema de detección de hidrocarburos basado en dos boyas Bat21 estratégicamente situadas para detectar los vertidos antes de que las manchas llegasen a la playa del Rinconcillo. La bahía, sometida a mucho tráfico marítimo, ganó en seguridad ya que, cuando los nuevos sensores detectaban el hidrocarburo flotando en el agua, las alarmas se transmitían automáticamente vía GSM al centro de control instalado en el Ayuntamiento de Algeciras y automáticamente eran reenviadas a los responsables de la lucha contra los vertidos mediante mensajes a sus teléfonos móviles.
Ursat instalará siete boyas más dentro del proyecto impulsado por la Diputación de Cádiz denominado Simcaba (Sistema Integrado de Monitorización de la Calidad de Agua de la Bahía de Cádiz), con detectores de hidrocarburos, sistemas de análisis físico-químicos y para el análisis bacteriológico. Además, el Simcaba integra un modelo matemático para predecir la evolución de la mancha de hidrocarburo, una vez detectada, en función de las condiciones oceanometeorológicas. "Una aplicación muy interesante para dar tiempo a los servicios de limpieza y rescate a que actúen y se adelanten a los acontecimientos", explica Martín Dueñas.
Análisis complejos
El análisis bacteriológico que hace la boya de las aguas, en tiempo real, se ajusta a la directiva 76/160/CEE sobre la calidad de las aguas de baño. El sensor que realiza el análisis bacteriológico de las aguas, el más complejo de todos, ha sido desarrollado conjuntamente por Ursat y los centros tecnológicos Inasmet y Azti, ambos de la corporación Tecnalia, y ya está funcionando desde el pasado día 24 de julio en la bahía de la Concha, en San Sebastián. La labor de investigación ha sido premiada con los galardones Gran Premio Especial Semana Verde 2003 y con el primer premio de Medio Ambiente del XVII Concurso de Innovación Tecnológica.
Bat21 envía también alarmas de funcionamiento si se detecta alguna anomalía o si se produce un desplazamiento no permitido de su posición, detectada por GPS, que pudiese hacer pensar en una rotura de la línea de fondeo por mala mar o incluso por vandalismo.
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