Medio ambiente sanciona a Carmen Janeiro por levantar un chalé en Grazalema

Cádiz - 12 jul 2003 - 00:00CEST

La Consejería de Medio Ambiente ha abierto expediente sancionador a la modelo Carmen Janeiro Bazán -hermana del popular torero Jesulín de Ubrique- por una vivienda construida presuntamente de manera ilegal en el paraje denominado Llano de Mesines, en el término municipal de Prado del Rey (Cádiz). La zona en la que se levantó el chalé está calificada como protegida dentro del Parque Natural de la Sierra de Grazalema. Medio Ambiente ha impuesto además a Carmen Janeiro una sanción de 30.000 euros.

Según el expediente de la Delegación Provincial de Medio Ambiente, Janeiro obtuvo licencia municipal para reformar una antigua casa de labor, situada muy cerca de la finca Ambiciones de la familia del torero. Esta obra contaba con el visto bueno de Medio Ambiente, que concedió las autorizaciones pertinentes tras analizar las características de la edificación. Sin embargo, Carmen Janeiro construyó al lado de la mansión una vivienda de nueva planta de 108 metros cuadrados de superficie más otros 18 metros de porche, cuando en realidad sólo había obtenido permiso para rehabilitar la cubierta y cambiar la techumbre de una antigua nave agrícola anexa a su vivienda.

Técnicos de Medio Ambiente detectaron hace varios días esta irregularidad y decidieron abrir el expediente sancionador, aunque no han podido comunicárselo todavía a la propietaria de la finca al no localizarla en su finca. Medio Ambiente ha decidido remitir la notificación de sanción económica y de derribo de la construcción ilegal al Ayuntamiento de Prado del Rey.

Posibilidad de recurso

"Es una sanción normal y ordinaria de la administración pública producto de una irregularidad por una construcción que no tiene autorización", aseguró ayer el delegado provincial de Medio Ambiente, Sebastián Saucedo, quien explicó que Janeiro, "como cualquier otra persona", tiene la posibilidad de alegar y presentar un recurso "para legalizar la construcción si cree que puede obtener una nueva licencia que restituya la legalidad infringida". Finalmente, el expediente podría acabar con el derribo del chalé.

Un episodio similar protagonizó a principios de la década de los noventa su propia familia, cuando Jesús Janeiro construyó sin los permisos obligatorios unas cuadras con cocheras, una piscina, una nave para ganado y dos viviendas nuevas en la finca Ambiciones, entre 1991 y 1993

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