UGT pide al Defensor del Pueblo un censo de mayores solos y en situación de riesgo
Representantes de la Unión de Jubilados y Pensionistas de UGT se reunieron ayer con el Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, para reclamarle "medidas inmediatas" que impidan la muerte de ancianos en soledad. Luis Fernández, secretario de la Unión de Pensionistas, explica que han buscado el amparo del Defensor "ante la falta de iniciativa del Ayuntamiento y la Comunidad, esto es, de las instituciones que tienen encomendada la tutela de los mayores".
Le han pedido a Múgica un censo de ancianos que viven solos con escasos recursos y aquejados de enfermedades de riesgo (coronarias, artrosis, Alzheimer...). El objetivo es que, a través de visitas o de teleasistencia, se realice un seguimiento de estos mayores.
El Ayuntamiento y la Comunidad acordaron en enero, cuatro meses antes de las elecciones, extender el servicio de teleasistencia (un medallón que, en caso de emergencia, se puede pulsar para contactar con una centralita) a 45.000 mayores más entre 2003 y 2005. Ahora son unos 13.000 los ancianos dotados de este sistema de alarma. Pero Fernández considera que el plan "se ha quedado en una operación de propaganda". "Hemos pedido varias veces a las instituciones datos de lo que se está haciendo, pero aplican la política del avestruz", añade. Fernández cree que habría que penalizar el abandono de ancianos. "Esta sociedad tiene que proteger a sus mayores porque lo que tenemos se debe al sacrificio que ellos han hecho", concluye. De los 132.595 jubilados que viven solos en la capital, el 40% supera los 80 años. Desde enero son casi medio centenar los mayores que ha fallecido en la soledad de sus hogares.
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