El enfado de Borrajo
El humorista Moncho Borrajo suspendió súbitamente las cuatro representaciones que tenía programadas en el teatro Campoamor, de Oviedo, de su espectáculo 30 años sin parar, enojado con lo que entendió como una falta de apoyo por parte de la dirección del coliseo, de gestión y propiedad municipales. En una brevísima comparecencia ante la prensa, horas antes de la que debiera haber sido su primera actuación, Borrajo se mostró indignado con la responsable de la programación del Campoamor: "Esta señora no me coge el teléfono, esta señora no habla conmigo, a esta señora se la llama y no da razón. Y ahora, cuando vengo al teatro, me encuentro con que no hay carteles míos, que esto es un cachondeo, que en la conferencia de prensa no hay un puto dossier mío y que aquí no hay un solo cartel. Ahora, un boicot como el que ha hecho en Oviedo esta señora a mí no me lo hace. Y aparte tiene muy poco de señora cuando no está aquí, en la rueda de prensa, dando la cara conmigo. Tenía que estar aquí y si no está es por algo. Y se acabó la rueda de prensa. Señores, me marcho de Oviedo y no trabajo". La aludida de forma tan crítica, Lucía García Calleja, asesora técnica de la Concejalía de Cultura, anunció su intención de emprender "las actuaciones legales pertinentes por amenazas e injurias" contra Borrajo e invitó a éste a "asumir el fracaso de las actuaciones previstas en el teatro Campoamor (97 y 145 entradas, según las funciones, para un aforo de 1.500 localidades) y no descargar su ira contra una humilde trabajadora".-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.