El PSOE expedienta a sus ediles navarros pero elogia "su coraje"

En cinco pueblos navarros, el PSOE se ha saltado el guión y sus concejales se han votado a sí mismos y han resultado elegidos alcaldes con el voto de diferentes fuerzas políticas locales de izquierda y nacionalistas, dejando fuera a Unión del Pueblo Navarro (UPN), versión del PP en Navarra. El PSOE rechaza la acusación de que ha vulnerado el Pacto Antiterrorista y, aunque ha abierto expediente a sus concejales, les elogia por su "coraje cívico".

Del tono que ayer utilizó el responsable de Política Municipal y Ciudades del PSOE, Álvaro Cuesta, se desprende más que benevolencia y comprensión hacia sus compañeros navarros que se han saltado el guión que rige en el País Vasco y también en Navarra según el cual los dos partidos constitucionalistas se votan entre sí para evitar que resulten elegidas fuerzas nacionalistas. A partir de hoy, este responsable federal del PSOE dará audiencia a los afectados, como es preceptivo en su reglamento interno cuando se abren expedientes disciplinarios, para que expliquen el porqué de su actuación. Quizá la dureza de las acusaciones del presidente del Gobierno, José María Aznar, como del secretario general del PP, Javier Arenas, y de numerosos dirigentes del PP y de UPN, han hecho que en el PSOE se salga en defensa de sus concejales, o, al menos, en alabanza de su "coraje cívico" y de las muestras que todos los días dan en defensa de la libertad, la democracia y la Constitución, en un terreno político de hostigamiento de los terroristas y de sus apoyos políticos. "Es impropio del presidente del Gobierno de España y del frívolo secretario general del PP, Javier Arenas, que lancen infundios sobre los concejales socialistas navarros diciendo que vulneran el Pacto Antiterrorista; no lo vulneran y, es más, son Aznar y Arenas quienes, una vez más, hacen un uso indebido y desleal del Pacto Antiterrorista".

Pero lo que la ejecutiva federal ha decidido es abrir expediente disciplinario a los suyos y analizar qué ha ocurrido en cada uno de los cinco municipios. En principio, la ejecutiva estima que cada caso es diferente y cada decisión se enmarca en circunstancias locales ya que no hay un hilo conductor en lo ocurrido en Estella, Tafalla, Burlada, Barañain y Sangüesa. Cuesta no adelantó en qué pueden terminar estos expediente disciplinarios pero sí se deshizo en elogios de estos compañeros. "El PP falta al respeto a los socialistas navarros que sufren el acoso de los violentos y cuya actitud heroica no se merece el desprecio que han mostrado Aznar y Arenas", señaló Cuesta. Este responsable glosó algunas de las actitudes de sus compañeros y se detuvo en uno de ellos, José Luis Lorenzo, alcalde de Sangüesa con sus propios votos, de IU, de grupos nacionalistas y de candidaturas independientes locales, así como los de Estella, Tafalla, Burlada y Barañain. La imagen de José Luis Lorenzo apareció en todos los medios de comunicación sollozando el pasado 30 de mayo cuando socorrió a un policía herido en el atentado en Sangüesa que costó la vida a dos agentes. Lorenzo consoló al herido hasta que llegó la asistencia sanitaria. "Nuestros compañeros no han vulnerado el Pacto Antiterrorista porque no han tenido los votos de ninguna fuerza que se haya negado a condenar actos terroristas", aseguró Cuesta. Este dirigente leyó los apartados del Pacto tanto los que se refieren a que ni el PP ni el PSOE suscribirán acuerdos con los partidos nacionalistas mientras no rompan el Pacto de Lizarra como los que citan la no utilización de uno y otro del terrorismo para atacarse políticamente. "Por las primeras investigaciones que estamos realizando creemos que no ha habido ningún pacto con fuerzas nacionalistas", adelantó Cuesta.

Pero este dirigente no sólo no reconoció que sus compañeros hayan podido incurrir en alguna vulneración sino que acusó a UPN de haber facilitado que en otros pueblos como Alsasua gobernara Aralar y que en Alsasua tampoco gobierne ningún partido constitucionalista. Enseguida UPN emitió una nota oficial en la que acusó a Cuesta de "mentir con mala intención" ya que las situaciones citadas eran irreversibles porque otras fuerzas ajenas a UPN y al PSOE habían pactado y de "común acuerdo" se decidió que los populares no votaran a los socialistas