¿Roca traidora o Robin Hood?
El senador socialista Juan Barranco, que se reunió con Peñafiel en el Senado en marzo, lo consideraba -así lo dijo en la Cámara Alta- una persona "con un brillante historial, trayectoria inmaculada, sensata, mesurada y equilibrada". Barranco explicaba ayer: "Estaba muy dolido y se veía humillado; su gran preocupación era defender su honor y honestidad". Su imagen era tan buena que cuando fue destituido los líderes sindicales Cándido Méndez y José María Fidalgo pidieron su restitución. Las asociaciones de guardias explicaban ayer que desde que fue relevado "se le veía muy nervioso".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.