Zaplana en lo alto y Miró en la nostalgia

Si el protagonismo en el interior del hemiciclo lo tuvo ayer el recién elegido presidente de las Cortes, Julio de España; en el exterior la atención se centró en el presidente del PP en la Comunidad Valenciana, Eduardo Zaplana, y en la ex presidenta de la Cámara, Marcela Miró. La segunda recibió al primero en la puerta de la institución y ambos se dirigieron al palco de invitados, situado en la última planta y que da directamente sobre el hemiciclo. La sesión se había iniciado sin él y el máximo dirigente de los populares valencianos, siempre celoso de las formas, torció el gesto. Desde su atalaya, Zaplana hizo un gesto de asentimiento con la cabeza cuando Julio de España, en medio de los aplausos de la Cámara, dirigió su mirada hacia arriba nada más ser proclamado presidente del Parlamento valenciano.

Camps y Pla se mostraron discretos y con soltura a la espera del debate de investidura

A la jornada de constitución de la nueva Cámara acudieron los alcaldes de Alicante y Castellón, los populares Luis Díaz Alperi y José Luis Gimeno, respectivamente; los presidentes de las diputaciones de Valencia y Castellón, Fernando Giner y Carlos Fabra, respectivamente, y los responsables de otras instituciones como el Síndic de Greuges, Bernardo del Rosal; la Acadèmia Valenciana de la Llengua, Ascensión Figueres; del Consell Valencià de Cultura, Santiago Grisolía; y el delegado del Gobierno, Juan Cotino. También acudieron Arturo Virosque, Rafael Ferrando y Rafael del Moral, entre otros dirigentes empresariales; así como miembros de la judicatura y el teniente general de la Fuerza de Maniobra Juan Ortuño.

En el palco y en el vino de honor no faltaron tampoco los senadores territoriales socialistas Antonio García Miralles y Joan Lerma, pero quien tuvo un mayor protagonismo fue la ex presidenta de las Cortes Valencianas, Marcela Miró, que recorrió los distintos corros. Y fue en los de la oposición donde, entre bromas y veras, hubo socialistas que reconocieron que la echarán de menos visto el arranque legislativo protagonizado por De España. Una afirmación que, con cortesía, no fue desmentida por Miró, que aprovechó su despedida para felicitar al parlamentario Andrés Perelló por haber convertido uno de los gemelos que como presidenta regaló a los diputados en una aguja de solapa.

Por su parte, el próximo presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y el dirigente socialista, Joan Ignasi Pla, se mantuvieron discretos y con soltura rodeados de los suyos. Ambos, aunque nuevos en las Cortes Valencianas, cuentan con suficiente experiencia parlamentaria en el Congreso de los Diputados y demostraron que -junto con el portavoz de l'Entesa, Joan Ribó- serán los referentes políticos valencianos.

De momento, ayer ambos evitaron tener mayor protagonismo del forzado por las circunstancias, a la espera del pleno de investidura que se celebrará la próxima semana y en el que confrontarán sus argumentos. Desde ayer, la política valenciana vuelve a recuperar su centro de gravedad en las Cortes Valencianas en detrimento de los partidos.