La oposición exige a Chaves que convoque elecciones en solitario para no eludir el debate andaluz

Los grupos de la oposición reclamaron ayer en el Parlamento al presidente de la Junta, Manuel Chaves, que convoque elecciones autonómicas "cuando quiera", pero en solitario. En una agitada sesión, ni la popular Teófila Martínez ni el portavoz de Izquierda Unida, Antonio Romero, pudieron arrancar del socialista cuál será su decisión sobre la fecha electoral. Como en anteriores declaraciones, Chaves no descartó ninguna hipótesis y reiteró que buscará la máxima participación: "Porque es bueno para las instituciones, para todos los partidos políticos y para mi partido".

Martínez y Romero coincidieron ayer en plantear la misma pregunta al presidente de la Junta en la sesión de control al Gobierno, pero cosecharon el mismo resultado: mutismo de Manuel Chaves sobre la fecha electoral. El debate sobre las elecciones andaluzas lo abrió él mismo cuando, dos días después de los comicios municipales del pasado 25 de mayo, abogó por agotar la legislatura. Días más tarde y en sendas entrevistas periodísticas, Chaves matizó que "no descartaba ninguna hipótesis" y que, a partir de octubre, las elecciones autonómicas podían celebrarse en cualquier momento.

Ayer, en sus respuestas, Chaves no habló de agotar la legislatura y se limitó a repetir: "No descarto ninguna hipótesis y contemplo todas las posibilidades". El presidente andaluz, que suele ser absolutamente hermético en cuestiones que, como ésta, son de su exclusiva competencia, se mostró cómodo en el debate con los dirigentes de la oposición, incluso se permitió bromear con Romero. "Le veo más esbelto y delgado tras su dolencia, no hay mal que por bien no venga", le dijo al diputado de IU. También se rió de él mismo cuando en una de sus intervenciones proclamó en tono solemne: "No voy a matar al consejero", en vez de al mensajero. "No voy a matar a ningún consejero o consejera", aclaró después provocando carcajadas en el salón de plenos.

Distinto tono empleó con Teófila Martínez, con la que estuvo ácido. "El PP", afirmó la popular, "no viene a hablar de su competencia, ni de fechas. Convoque cuando quiera, pero reclamamos un debate en solitario". La jefa de la oposición acusó al socialista "de no querer hablar nunca de su responsabilidad", de "escaquearse de todos los debates" y de "no confiar" en la autonomía andaluza "si cree que un debate sobre la comunidad no va a favorecer la participación". "Sería un gran fracaso de su partido que los 20 años de gobierno del PSOE no hayan servido para fomentar la participación", subrayó Martínez, quien reprochó a Chaves el querer debatir de la catástrofe del Prestige y de la guerra de Irak, pero no de Aznalcóllar. "A usted no le interesa hablar de Andalucía, quiere escurrir el bulto y por eso no quiere elecciones en solitario".

Chaves se mostró aparentemente sorprendido por las críticas de Martínez y se preguntó si en los debates que ambos habían mantenido en el Parlamento la discusión se había centrado sobre "el sexo de los ángeles". "Hemos debatido de los problemas de Andalucía", afirmó el presidente andaluz quien espetó a la popular: "Nada, salvo quizás sus límites, le ha impedido debatir conmigo". Estas hirientes palabras provocaron airadas protestas de los diputados populares, sobre todo, de la propia Martínez, lo que ocasionó que tanto Chaves como el presidente de la Cámara, Javier Torres Vela, pidieran a la par calma a los parlamentarios. "¡Tranquilidad, tranquilidad!", decía Chaves; "¡silencio, señorías, silencio!", exigía Torres Vela.

Antonio Romero también esgrimió la necesidad de un debate netamente andaluz para pedir a Chaves que convoque elecciones separadas y "no descafeinar" la autonomía andaluza y exigió al socialista que no se escudara "en un privilegio jurídico" para evitar comprometerse a unos comicios en solitario. "No le voy a dar ninguna fecha, porque en estos momento no lo tengo claro. Buscaré la máxima participación porque eso es bueno para las instituciones, para todos los partidos y para mi partido", afirmó Chaves.