Pactos en Estepona
En el PSOE se están dando posturas distintas con relación al deseo de los socialistas de Estepona de pactar con el PES. Mientras que el candidato Antonio Barrientos se empeña en pactar con el PES, Manuel Chaves dice que no, que el voto del PES no es válido para pactar. Y la secretaria provincial, Marisa Bustinduy, dice que la puerta de las negociaciones está entornada.
En el PSOE, la discrepancia siempre ha estado viva, propio de una democracia plural; pero, en estas negociaciones, ¿cuál es la sensibilidad que lleva a Manuel Chaves y Marisa Bustinduy a mantenerse contrarios a su compañero? ¿Acaso no les convencen las tesis que defiende don Antonio para alcanzar su propósito? Pues para la sociedad esteponera ha quedado claro que don Antonio está dispuesto a entrar a gobernar.
El PSOE está en un buen momento para debatir sobre los resultados electorales y, con ello, poder enriquecerse hacia dentro, para conseguir hacer una oposición rigurosa desde la unidad del partido, y alcanzar con ella la tan deseada regeneración interna. El PSOE tiene una ocasión de oro para fortalecerse y llevar a cabo una política socialista y democrática.
No es adecuado ni conveniente que su secretario se enfrente a sus compañeros públicamente para defender lo que el pueblo no llegaría a entender, ni aceptar. Insistir para alcanzar el bastón de mando a cualquier precio no haría sino dejar abierta una fisura donde proliferaría la disgregación total del partido. Bien es cierto que don Antonio ha colaborado a ello hasta la saciedad desde que asomara por la puerta del partido, pero todavía se está a tiempo de poner pie en pared y frenar a tan dislocada carrera política de un militante que está verde y que necesita aprender, aunque licenciado en Medicina.
