Rojas-Marcos anuncia su dimisión del Metro aunque no la relaciona con la derrota del PA en Sevilla

El presidente de la Sociedad Metro de Sevilla, el andalucista Alejandro Rojas-Marcos, anunció ayer que ya ha presentado su dimisión como presidente de la sociedad Metro de Sevilla ante la consejera de Obras Públicas de la Junta, Concepción Gutiérrez. Rojas-Marcos argumentó que "no tiene sentido" su presencia al frente de esta sociedad pública porque él ya no forma parte de la Corporación municipal y porque el proyecto del metro, para el que se creó, "ya es una realidad". El Grupo Socialista del Ayuntamiento de Sevilla advirtió ayer de que no tiene previsto sustituir a Rojas Marcos ya que la sociedad que preside "desaparecerá en breve" y se integrará en el consorcio que pondrán en marcha la Junta. "No supondrá trastorno alguno para la marcha del proyecto del metro", añadieron las mismas fuentes.

Rojas-Marcos subrayó ayer en Cádiz que el pasado lunes, intentó contactar con el alcalde sevillano, Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE), para felicitarle por su triunfo electoral y para poner a disposición del Consistorio su cargo.

"Ya no tiene sentido mi presencia en la Sociedad del Metro, porque yo lo hice para hacer realidad este proyecto y, puesto que ya lo es y ya no estoy en la corporación municipal, el Ayuntamiento y la Junta tienen que nombrar a sus representantes en el ente público", recalcó el dirigente andalucista.

El partido de Rojas-Marcos, el PA, del que es presidente, ha obtenido unos pésimos resultados en las elecciones del domingo y se queda en principio fuera del gobierno municipal, tras 12 años de presencia en tres gobiernos de coalición con PP y PSOE. Rojas-Marcos, sin embargo, no relaciona su dimisión con el hundimiento del PA en Sevilla.

El PA ha perdido dos de los seis concejales que tenía en el Ayuntamiento sevillano y, por primera vez en 12 años, se ha quedado sin la llave de la gobernabilidad de la ciudad. Entre los proyectos abanderados por los socialistas durante los tres mandatos que han formado parte del gobierno, ha destacado por encima de todos el metro, que Rojas-Marcos convirtió casi en una batalla personal. PSOE y PA se comprometieron en la firma del pacto de gobierno en 1999 a desbloquear el metro. Otro proyecto de Rojas-Marcos de dudosa rentabilidad fue el estadio de la Cartuja, cuyo coste se disparó a más del doble de lo presupuestado.