Luis insinúa ahora que el Atlético le ha ofrecido seguir
Luis Aragonés, traje gris y cuello de la camisa desordenado y abierto, sin corbata, no se cansó ayer de repetir una misma frase: "De eso no hablo". La repitió muchas veces. Pero también, en medio de sus negativas a responder sobre su posible continuidad al frente del Atlético, dijo, en una confusa alocución, que el club le ha ofrecido la posibilidad de dar marcha atrás en su decisión de irse.
El técnico, que se negó a firmar en su día un documento haciendo expresa su renuncia verbal a la temporada de contrato que le queda, reveló hace dos semanas a sus jugadores, en el vestuario, que no seguirá en el próximo curso. A continuación se lo dijo al director general, Miguel Ángel Gil Marín.
Precisamente Gil Marín aseguró el miércoles que no ha ofrecido la continuidad a Luis y negó tajantemente cualquier contacto reciente con el veterano preparador. De hecho, según una información del diario As, Gil Marín pidió 300.000 euros a su padre para pagarle el finiquito. Y, siempre según As, Gil se negó a darle ese dinero.
De buen humor, Luis reconoció ayer que el anuncio de Gil de renunciar a su cargo de presidente le ha "pillado por sorpresa" y que se enteró "por la noche". Sin embargo, y pese a que uno de los detonantes de su renuncia al año de contrato que le queda es su mala relación con Gil, fue rotundo al afirmar: "Que yo siga o no en el equipo no tiene nada ver con que Gil se vaya o se quede". "Yo no me alegro de que se vaya nadie", subrayó después. Eso sí, el entrenador, reforzando su sorpresa, confesó: "No esperaba que Jesús dimitiese", aunque admitió: "Si se va, es por algo. Tendrá sus motivos".
"Ambiente para morirse"
Luis trató luego de centrar su discurso en el partido de hoy, en el estadio Calderón, frente al Villarreal, y calificó el ambiente extradeportivo "como para morirse". El técnico negó que los últimos acontecimientos puedan desestabilizar a los jugadores: "Esas cosas las piensan los periodistas. Los profesionales del fútbol tenemos unos códigos y sabemos que estas cosas pasan, pero también sabemos cómo actuar y cómo estar por encima de estos acontecimientos".
Finalmente, Luis calificó a los jugadores de "artistas" e insistió en que "en el césped se olvida todo". Y sobre su situación personal aseguró: "Para mí no es difícil trabajar en estas condiciones. Mis ideas son las mismas y mi forma de trabajar también".
Luis recupera para el choque contra el equipo castellonense a Luis García y Fernando Torres, los dos máximos goleadores del equipo rojiblanco. Precisamente el joven ariete negó ayer la posibilidad de ser vendido a otro club para sanear la economía del club: "Si se hace la ampliación de capital, que creo que se hará, el Atlético no necesitará venderme". "Además", añadió, "hay otras muchas fórmulas para obtener dinero que no son mi venta. Yo me quiero quedar en este club".
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