Interior y el Gobierno vasco pactan compartir los datos sobre ETA

El Ministerio del Interior y el Departamento vasco de Interior han cerrado un acuerdo para compartir la documentación que las Fuerzas de Seguridad del Estado y la Ertzaintza logren incautar a ETA. El acuerdo, que fue anunciado ayer por el consejero vasco, Javier Balza, pone fin a la polémica que los Gobiernos central y vasco han mantenido durante los últimos meses por los supuestos déficit de información que la policía vasca tenía sobre la información incautada por policía y Guardia Civil a comandos etarras.

El consejero Balza había denunciado, entre otras cosas, que Interior no les había pasado datos sobre la vigilancia de etarras a jueces cuya protección estaba encomendada a la Ertzaintza. Balza también llegó a decir que el ministerio no había informado sobre la contravigilancia a la que estaba siendo sometido el parlamentario socialista vasco Fernando Buesa antes de ser asesinado por la banda terrorista. La información se canalizará a través de una comisión en la que estarán representantes del ministerio y del departamento vasco. Esa comisión evaluará también las decisiones que deban adoptarse en función de la información que se consiga. La Audiencia Nacional, por otra parte, ha condenado a diez años de prisión a Eneko Olza Puñal por incendiar en marzo de 1997 un cajero automático durante una algarada callejera en Pamplona. El incendido causó daños en la surcursal bancaria atacada. La sentencia, la más dura hasta ahora por un hecho de estas características, atribuye al condenado el delito de "incendio terrorista". Es la segunda vez que la Audiencia Nacional aplica este tipo delictivo para hechos relativos a la llamada lucha callejera. En la ocasión anterior, cuatro jóvenes fueron condenados a 17 años, y otros dos a 10, por el incendio de un autobús en Basauri (Vizcaya). En este caso, el conductor del autobús resultó herido grave.