"Los padres tienen que leer los libros de sus hijos"

El escritor Joanes Urkixo ha ganado con la novela de aventuras El guerrero blanco el V Premio Abril de Narrativa para jóvenes, convocado por Editores Asociados y la Fundación Ámbito Cultural-El Corte Inglés. El galardón le permitirá recibir 20.000 euros a cuenta de los derechos de autor que generen las ventas de la novela en castellano, euskera, catalán, gallego, asturiano y aragonés. Todas las versiones se publicarán simultáneamente en septiembre.

Pregunta. ¿Condiciona a un escritor presentar una novela a un concurso?

Respuesta. No; yo tenía la novela estructurada sin saber que se iba a presentar a un concurso. La idea fue de la editorial y me pareció interesante, porque yo llevaba un tiempo pensando en buscar una proyección fuera de Euskadi para lo que escribía.

P. ¿Qué significa ver la obra traducida?

R. Es una emoción personal porque me permite llegar a un público al que no he llegado nunca, y colectiva porque, si escribo en euskera, es por una opción que tome hace muchos años. Yo quiero que mi lengua vaya creciendo, que tenga cada vez más hablantes y más lectores, y trato de contribuir a ello modestamente con las cosas que escribo. El hecho de trascender a otras lenguas contribuye a que se consolide la cultura y, en especial, la literatura en nuestra lengua.

P. ¿Qué tiene de diferente la literatura juvenil?

R. Creo que es un error considerarla aparte, o como un género. No responde a la definición de género. Es, simplemente, una forma de escribir con ciertas especificidades porque el lector es específico; dentro de esos límites puedes escribir literatura de aventuras, de misterio o comedia.

P. ¿Tienen una responsabilidad especial los escritores con los lectores jóvenes?

R. Evidentemente. Cuando escribes para jóvenes lo debes tener siempre en cuenta. Sabes que estás intentando trasmitir no sólo un divertimento sino una serie de valores. En el género de aventuras y fantasía, que es lo que más cultivo, es más sutil; se trasmiten unos valores básicos, más genéricos, como la lealtad o la honradez. El género contemporáneo, la comedia urbana, permite trasmitir valores más concretos.

P. ¿Qué le aporta su experiencia como guionista?

R. La utilizo muchísimo y la literatura juvenil es el terreno perfecto para hacerlo. Mi forma de trabajar es la misma con las novelas que con los guiones: primero estructuro el argumento y en ocho o 10 páginas tengo un libro completamente desarrollado y estructurado en capítulos

P. ¿Qué pesa más a la hora de crear nuevos lectores, la escuela o la familia?

R. Pesa más la escuela, pero no debería ser así. Muy a menudo el padre y la madre leen muy poco; no tienen ningún conocimiento ni control sobre lo que leen sus hijos. Los críos perpetúan el esquema: los padres no leen y los hijos tampoco. Si falta un ambiente de lectura, nunca leerán a gusto.

P. ¿Cómo se puede estimularla lectura de los jóvenes?

R. Los padres tienen que leer los libros de sus hijos. Es una forma de entenderles mejor, de compartir sus experiencias; estás más cerca de tus hijos y te sientes más joven. Y permite elegir mejor las lecturas y ayudarles a descubrir nuevos libros.

P. ¿Y en la escuela?

R. El problema es que a menudo se deja todo en manos de los profesores, que muchas veces, se lo he dicho personalmente, son unos vagos redomados. Año tras año mandan a los chavales leer los mismos libros, hasta que están descatalogados. Es muy frecuente que los profesores no lean y no estén al día en literatura.