La recuperación económica se retrasa a 2004

A los empresarios no les ha ido mal el primer trimestre del año. Son mayoría los que han aumentado ventas y beneficios. Sin embargo, el 48,9% detecta un empeoramiento de la situación económica, y el 75% retrasa la recuperación hasta el año 2004.

El 75,8% de los encuestados desaprueba la política antiinflacionista y casi el 60% la política de investigación y desarrollo

Pese a que la evolución de la facturación y la rentabilidad ha mejorado en el primer trimestre del año con respecto al segundo semestre del año anterior, las grandes empresas detectan un peor clima económico y atrasan el inicio de la recuperación. Si a final del año pasado sólo una tercera parte situaba en el año 2004 el inicio de la recuperación, ahora son tres cuartas partes las que opinan que hasta el año que viene la situación no mejorará.

Mientras tanto, es la demanda interna la que tira de los buenos resultados. Las empresas españolas, a juzgar por los datos del Barómetro de Empresas realizado por Deloitte & Touche con la respuesta de 371 compañías, se miran cada vez más el ombligo, como lo demuestra el hecho de que las exportaciones siguen su paulatino descenso con respecto al total de la facturación.

En el primer trimestre del año, el 65,2% ha aumentado sus ventas, lo que ha provocado que el beneficio se incrementara en el 65,4% de las compañías, aunque en niveles inferiores a los del año pasado. Por sectores, finanzas y construcción han sido los más favorecidos, mientras que por facturación las grandes empresas han sido las más rentables.

Sólo la mitad de las empresas, el 49,8%, ha incrementado su volumen de inversión, mientras el 31,8% la ha mantenido. La competitividad y la ampliación del negocio son las causas más importantes para el aumento. Por lo que se refiere al empleo, la mayoría de las empresas (51,7%) ha optado por mantener la plantilla en el primer trimestre, frente al 34,4% que la ha aumentado.

La valoración de la política económica del Gobierno se divide a partes iguales entre quienes se muestran indiferentes y quienes la juzgan como buena, con un 37,5% de respuestas. Un 2,3% dice que es muy buena y un 28,7% la valora como mala o muy mala. La política de fiscalidad y gasto público es la más apreciada, mientras que el 75,8% de los encuestados desaprueba la inflación, y 59,7% la política de investigación y desarrollo.

Con vistas al conjunto del año, la mayoría de los empresarios (75,7%) piensa que evolucionará desfavorablemente la matriculación de vehículos, los ingresos por turismo (62,1%) y la morosidad en el crédito bancario (62,5%).

La gran mayoría de los encuestados (85%) opina que las próximas elecciones locales y autonómicas no influirán en su área de negocio. Y el 68,3% cree que su sector es competitivo respecto a sus competidores europeos.