"Las relaciones con Rabat le corresponden a Exteriores"

Juan Jesús Vivas, de 50 años, es alcalde y presidente de la Ciudad Autónoma de Ceuta. Llegó al cargo en febrero de 2001, a raíz de una moción de censura del PP apoyada por cinco parlamentarios disidentes del Grupo Independiente Liberal (GIL), el partido de Jesús Gil.

Pregunta. Ustedes han elaborado un vídeo electoral que termina con el logotipo del PP sobre la foto de los soldados que izaron la bandera española en isla Perejil. ¿Cuántos diputados cree que vale esa foto?

Respuesta. No sé el impacto electoral que pueda tener el asunto del Perejil. De lo que sí estoy seguro es de que los ciudadanos de Ceuta nos sentimos plenamente satisfechos de la determinación, de la firmeza y del tratamiento que al asunto le dio el Gobierno.

"El comercio no debe referirse exclusivamente a Marruecos"

P. ¿Confía usted en la mayoría absoluta?

R. Deseo un resultado que nos permita llevar a cabo nuestro programa. Pero una respuesta electoral muy favorable al PP en ningún caso tendría como consecuencia el abandono de la política de consenso.

P. Usted tiene un pecado original: llegó al poder gracias a los disidentes del GIL. ¿Cómo piensa devolverles el favor?

R. No tengo sensación de pecador. Aquí hubo una situación de ingobernabilidad manifiesta. Una vez que el GIL se dividió en dos grupos, el PP era mayoritario en la Asamblea y tenía que asumir el reto del Gobierno. Ni entonces hubo contraprestaciones a la disidencia, sino acuerdos concretos, ni ahora tampoco las habrá.

P. Los ingresos de la ciudad por el comercio con Marruecos han caído en el último año un 30%. ¿De qué va a vivir Ceuta dentro de siete años, cuando se produzca el desarme arancelario en Marruecos?

R. Es cierto que se ha producido una regresión notable en las ventas. El comercio necesita una adecuación a los nuevos escenarios de nuestro entorno, de modo que sus operaciones no se refieran exclusivamente a Marruecos.

P. ¿Cómo se concilian intereses nacionales, como la lucha contra la inmigración ilegal, con los beneficios del comercio que aquí llaman "atípico" y en Marruecos llaman "contrabando"?

R. No hay relación entre la inmigración irregular y el comercio atípico, del que no acepto que se denomine contrabando, porque es el cliente marroquí el que viene a Ceuta, compra el producto y lo pasa al país vecino.

P. A pesar de que Ceuta se promociona como "la ciudad de las cuatro culturas", existen ciertos problemas de integración. ¿Cómo se propone abordarlos?

R. La convivencia debe estar basada en el respeto, en que la diversidad es fuente de riqueza y no de confrontación, en la tolerancia y en la aplicación estricta, rigurosa y categórica de la Constitución. Sin discriminaciones, privilegios ni exclusiones. Ésa es la clave.

P. ¿Cuándo va a poder patrullar la policía el barrio del Príncipe sin llevar pasamontañas?

R. En el Príncipe hay condiciones de marginalidad, como en barrios de otras ciudades. Para solucionar el problema no hay más opción que incrementar la formación y los equipamientos públicos.

P. ¿Cómo son sus relaciones personales e institucionales con las autoridades de Marruecos?

R. Las relaciones con las autoridades de Marruecos le corresponden al Ministerio de Asuntos Exteriores. Es un ámbito que no invado y respeto de forma tajante.

P. Recientemente han visitado Marruecos los presidentes de Andalucía y de Canarias. Sorprende que usted no haga lo propio.

R. Supongo que han tenido el plácet del Ministerio de Asuntos Exteriores. Yo no he tenido necesidad de que me lo den porque no lo he pedido.

P. ¿Cuándo llegará la hora de que España y Marruecos se pongan de acuerdo sobre el futuro de Ceuta?

R. España y Marruecos no se tienen que poner para nada de acuerdo sobre el futuro de Ceuta. No hay ninguna razón jurídica, histórica o política para las pretensiones de Marruecos. Ceuta es España, lo ha sido, lo es y seguirá siendo. De este tema no hay nada que hablar con Marruecos.