Correlaciones políticas en el organismo que arbitra el mercado

La OPA fue rechazada en la última votación del consejo de la CNE, realizada anteayer, por seis de sus miembros: el presidente, Pedro Meroño; el el vicepresidente, Fernando Martí y los vocales ponentes, Carlos Duato; María del Carmen Fernández; Carlos Duato; José Sierra y Francisco Javier Peón. Frente a ellos, otros tres consejeros Jordi Dolader, Sebastiá Ruscalleda y Jaime González, defendieron que la operación se autorizara con condiciones.

La composición de la CNE expresa la correlación política existente en el Congreso de los Diputados en la medida en que los vocales del organismo fueron nombrados a propuesta del titular de Economía, Rodrigo Rato, pero tras un debate en comisión.

En la resolución de la OPA de Gas Natural sobre Iberdrola, han jugado las afinidades. Los cuatro vocales que votaron en contra de la oferta, junto al presidente y vicepresidente, están en línea con los deseos del Gobierno del PP, que los propuso; y de los tres que votaron a favor, dos son afines a los nacionalistas de CiU y uno al PSOE.

Debajo de los argumentos técnicos se apuntan las ideologías que definen un modelo económico para España. Ayer, tras conocerse la decisón del organismo, el secretario de Estado de Economía, Luis de Guindos y el portavoz de Economía del PP, Vicente Martínez Pujalte, manifestaron su "respeto" a la CNE.

Por su parte, el consejero de Industria de la Generalitat, Antoni Fernández Teixidó, y el conseller en cap, Artur Mas, cuestionaron la "neutralidad" de la CNE y tildó la resolución de "política".

Por su parte, Antoni Castells, el secretario de Economía del PSC, manifestó que "la decisón que no es propia de un organismo que debe arbitrar" ; Castells añadió que en Madrid no "entienden que una proyecto industrial se forje en el Paseo de Gracia de Barcelona y no en la Castellana".