Fallece uno de los tres inmigrantes apaleados cuando dormían junto a la estación de autobuses de Huelva

Mohamed Z., de 60 años, uno de los tres inmigrantes marroquíes que la madrugada del pasado jueves recibió una brutal paliza por parte de una banda de cinco encapuchados en las inmediaciones de la estación de autobuses de Huelva, murió ayer en el hospital Virgen del Rocío de Sevilla a causa de las graves heridas que sufrió en la cabeza.

El radiólogo que lo atendió de urgencia en el hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva quedó impresionado por la magnitud de las brechas y pronosticó que resultaría muy difícil salvarle la vida. La hipótesis de un ataque racista pierde peso, según fuentes próximas a la investigación.

La policía considera que se pudo tratar de una ataque contra mendigos o un ajuste de cuentas entre mafias que controlan el tráfico de inmigrantes sin papeles, según la policía.

Las tres víctimas, de 60, 24 y 30 años, llegaron a Huelva el miércoles procedentes de Almería, con la intención de trabajar en algún tajo fresero de Lepe. Pero llegaron tarde para subir al último autobús con destino a esa localidad. La agresión se produjo en torno a las 4.00 del jueves sobre el césped que hay en la avenida de Portugal, junto a la estación de autobuses de Huelva, una zona que en las últimas semanas se ha convertido en improvisado refugio de extranjeros que no tienen donde cobijarse durante la noche. El hombre de 24 años sufrió cortes en una pierna y los médicos le dieron el alta el mismo jueves. Su compañero, de 30 años, continúa ingresado en en el hospital Virgen del Rocío, con heridas en la cabeza. Se prevé que mañana reciba el alta.

El subdelegado del Gobierno en Huelva, Carmelo San Martín, manifestó ayer que se trata de un hecho complicado, que no tiene precedentes en la capital onubense. "Algo así no se había dado nunca en Huelva, ni en relación a inmigrantes ni en relación a no inmigrantes. Sencillamente no se había producido. La investigación está resultando difícil, pero yo tengo el convencimiento de que este suceso va a ser finalmente esclarecido. Estamos volcados", dijo.

Carmelo San Martín indicó que no hay testigos del momento de la agresión y pidió la colaboración de los ciudadanos que puedan aportar algún dato. "De momento, lo único cierto que tenemos es que un grupo de personas ha dado una paliza de muerte a otro grupo de personas", señaló.