"El plan del Gobierno para llevar el AVE a las capitales andaluzas va con retraso generalizado"

Asegura que la decisión del Ministerio de Fomento de bloquear sus proyectos para duplicar la vía en la línea Bobadilla-Granada, le ha cogido de sorpresa y confía aún en una rectificación. Concepción Gutiérrez (Jaén, 1954) sostiene que su intención es adelantar trabajo para que el Gobierno haga una conexión de alta velocidad a Granada similar al AVE Madrid-Sevilla en 2007. Y que esta actuación, como otras en el eje ferroviario transversal (conexión regional Sevilla-Granada-Almería, Sevilla-Cádiz y Sevilla-Málaga), contaban hasta ahora con el visto bueno de Fomento.

Pregunta. ¿Cuál ha sido la actuación de la Junta en este eje?

Respuesta. Con el eje ferroviario transversal, que el Gobierno declaró deficitario en 1985, la Junta ha mantenido una doble relación. Por una parte, ha firmado unos convenios por los que subvenciona el billete para mantener el servicio ferroviario. Por estos convenios se pagan unos 1.200 millones de pesetas a Renfe, que debe gastar ese dinero en realizar obras de mantenimiento en Andalucía. Aparte de esos convenios, ha habido siempre acuerdos, a veces verbales o tácitos, para mejorar el eje ferroviario transversal: con esas actuaciones, la Junta ha mejorado el 50% del mismo entre Sevilla y Granada. Y, desde que el AVE Sevilla-Madrid es una realidad, las mejoras incorporan unas cuestiones técnicas que facilitarán las comunicaciones con alta velocidad. En los presupuestos de la comunidad figura una partida, aparte de la del convenio con Renfe, reservada para estas mejoras, que han supuesto 20.000 millones de pesetas y han permitido reducir ya los tiempos: entre Almería y Sevilla, los regionales tardan ahora cinco horas, antes estábamos en siete. Uno de los argumentos de Fomento es que estas inversiones debían estar en el convenio con Renfe y no es así en absoluto.

"En el tramo Bobadilla- Granada sólo queremos adelantar trabajo para la alta velocidad"

"Los planes de Fomento pueden abortar nuestro proyecto de triplicar los regionales en 2010"

P. Pues Fomento les acusa de invasión de competencias.

R. Nunca ha habido cuestionamiento de la titularidad estatal y los convenios con Renfe hacen referencia a la subvención a la explotación, no contienen los acuerdos de mejora. Los cuatro proyectos que quiere impugnar el Gobierno son para facilitar la construcción de la doble plataforma en los 62 kilómetros del tramo Bobadilla-Granada [la línea tiene 122 kilómetros] que ya ha acondicionado la Junta. Es decir, para facilitar que luego haya alta velocidad en una línea con doble vía, ancho internacional, electrificada, etcétera. Entre esos cuatro proyectos está el subtramo Loja-Tocón, donde ya hay obras, y ahí vamos a hacer la doble plataforma en esos 16 kilómetros. En los otros tres, el gabinete jurídico entiende que hay competencia para redactar los proyectos aunque no se va a hacer obra sin autorización del Ministerio. Son actuaciones dentro del espíritu de cooperación que había, espíritu que ahora se ha roto.

P. Un recurso contencioso-administrativo del Gobierno tiene muchas posibilidades de suspender cautelarmente los proyectos.

R. Estoy segura de que va a haber una rectificación que permita tener la alta velocidad en 2007 con todas las garantías en esos 122 kilómetros. Y si no, ya veremos, pero en el subtramo Loja-Tocón hay un escrito favorable de un director general de Fomento y un nombramiento realizado por Renfe para supervisar esa obra.

P. Fomento sostiene que para llevar el AVE a Granada en 2005 no es necesaria la doble vía.

R. Yo le hice una oferta al ministro hace un año para centrar la inversión de la Junta en el tramo Granada-Bobadilla y adelantar fases: la previsión del Ministerio era de una inversión de 110.000 millones de pesetas para una doble vía de alta velocidad, con una primera fase de 64.000 millones. El ministro, en esa reunión lo vio bien. Pero luego hay un cambio, de modo que la línea con doble vía, el ancho internacional y la electrificación completa de los 122 kilómetros se dejan para dentro de 25 años. El ministro se inclinó en septiembre por reducir el tiempo de viaje entre Madrid y Granada aprovechando la puesta en servicio en 2005 de la alta velocidad entre Córdoba y Málaga y mantener la única vía actual entre Bobadilla y Granada. Se utilizará una nueva locomotora de Talgo que teóricamente puede circular por vía no electrificada y al mismo tiempo por la alta velocidad. Pero el compromiso de desarrollar todas las características de alta velocidad antes de 2007 se ha disuelto.

P. El Ministerio dice que hacer ya la doble vía es un derroche, que la demanda no lo justifica.

R. No hay más que referirse a la única prueba que tenemos, el AVE Madrid-Sevilla, para comprobar hasta que punto ese argumento es débil. Yo recuerdo que el Partido Popular decía siempre sobre el AVE a Sevilla el mismo argumento: excesiva capacidad para las necesidades que había. Y esa línea ahora es absolutamente rentable, se han superado las previsiones más optimistas: el AVE se ha comido un 48% de la cuota de transporte mecanizado, eso es brutal. Para el 2010, nuestra previsión es que si dispusiésemos de la doble vía en el tramo Bobadilla-Granada podríamos triplicar el número de viajeros de los servicios regionales hasta llegar a los 15 millones de viajeros al año.

P. ¿Hasta qué punto condicionan los planes de Fomento el desarrollo de los servicios regionales?

R. Con una línea única se cuestionan fundamentalmente las frecuencias y la calidad del servicio. Habría que hacer un sistema de ráfagas, en el que habría que esperar a que el tren más lento cubra el tramo para permitir pasos en dirección contraria, con lo que sólo serán posible un máximo de seis frecuencias. Y las necesidades de la cruceta básica Córdoba-Málaga-Sevilla-Granada exigen ya un regional cada media hora. Ése es el gran desafío que tiene la Junta. Pero es un proyecto que puede verse abortado si en la columna vertebral no se cuenta con la doble vía.

P. Las obras que ahora impugna Fomento acapararían la inversión ferroviaria de la Junta en los próximos años. El PP desconfía de que eso pueda mantenerse.

R. Lo curioso es que el PP, que lleva gobernando ya siete años, entre Bobadilla y Granada no ha invertido ni un duro ni un euro. Y la Junta ha invertido ya más de 10.000 millones de pesetas en ese tramo. Tenga en cuenta que si en los años ochenta, toda la obsesión era la comunicación de las ocho capitales con carreteras de alta capacidad, ahora la segunda modernización de la Junta pasa por un sistema mucho más sostenible desde el punto de vista medioambiental, mucho más adecuado y eficaz. Y no nos lo inventamos nosotros, es una apuesta de la UE. La Junta va a exigir por todos los medios que el Gobierno haga esa infraestructura en el 2007, para poder programar entonces un servicio regional de altas prestaciones.

P. Lo cierto es que es tiempo de elecciones...

R. En las infraestructuras las apuestas son a muy largo plazo, no son apuestas de última hora para coger sitio en ninguna foto. En concreto en ese tramo, llevamos 11 años actuando. Éste era el paso siguiente, porque aparte de los 62 kilómetros en los que hemos actuado, hay una gran variante de trazado prevista, entre Peña de los Enamorados y Loja, que es costosa y compleja y debe acometerla la Administración central. En los 62 kilómetros sólo queríamos adelantar trabajo con la doble plataforma.

P. ¿Cómo evalúa el plan de Fomento para conectar por AVE las capitales andaluzas con Madrid?

R. El compromiso adquirido en ese plan es la conexión de las ocho capitales y Algeciras con Madrid, con una inversión de 800.000 millones de pesetas, en 2010. Y va todo con retraso generalizado: es clamoroso el retraso que acumulan la comunicación de Almería por la línea de Levante, una infraestructura prometida en el plan para 2005. Hay un tremendo retraso en la comunicación de Huelva hasta Sevilla. En Cádiz, no digamos, sobre todo en lo que es la duplicación de la vía hasta Jerez y en la bahía de Cádiz, de la que dependen también los servicios de cercanías. La comunicación de Bobadilla con Algeciras la anunciaron a bombo y plantilla, pero no ha habido nada más. Únicamente se ha desarrollado la Córdoba-Málaga gracias al impulso de la Junta y al empeño de la ciudadanía y todos los sectores de Málaga en la anterior legislatura, ante lo que el Gobierno se ha visto obligado a ejecutar la obra. Y para la integración urbana en las ciudades de estas conexiones se reunieron una vez las comisiones tripartitas y nunca más se supo.