Sin paella ni autobús

"Venimos aquí sin que nadie nos pague el viaje ni la paella", decía con sorna Vicenç, que roza los 40 años, en clara alusión a la manifestación subvencionada por el PP hace unas semanas en Valencia en apoyo del Plan Hidrológico Nacional (PHN). Del pueblo de Vicenç, Miravet, de 800 habitantes, partieron dos autobuses repletos. Otros 50 vecinos se desplazaron en automóvil.

Los manifestantes de las tierras del Ebro eran ayer los más numerosos en Barcelona. Solamente en Deltebre, la localidad donde desemboca el río, se movilizaron 2.000 personas para participar en una nueva jornada reivindicativa, esta vez bañada por un sol primaveral. Entre ellos, un gran lienzo de 40 metros de largo en contra del PHN marchaba al ritmo del pasodoble Amparito Roca.

"¡El río es vida, no al trasvase!", era el grito de guerra de los manifestantes, una gran mayoría de los cuales, bajo camisetas azules, mostraban carteles de rechazo al apoyo de la Generalitat al plan: "L'Artur Mas ens ha venut lo riu".

Otro nutrido colectivo procedía de distintos puntos de Aragón. Madrugaron aunque ayer fuera domingo. En Huesca, algunos subían al autocar a las 6.30. Tuvieron suerte. A la mayoría de sus colegas de la provincia de Zaragoza no les quedó otro remedio que hacer el viaje en automóvil, ya que los conductores de autobús de la provincia estaban ayer en huelga.