Versión original

Siento contradecir al amigo Ian Gibson por su columna titulada Versión original pues lo primero que debe esperarse de un intelectual es tener la mente equilibrada sin dejarse obnubilar por un antiamericanismo primitivo que tan de moda está y que ni siquiera le permite reconocer su inglés nativo.

El ministro Mohamed Saeed Al Sahaf que I.G., yo y cualquier abonado a cable puede ver casi a diario en BBC World no es de Defensa sino de Información, ministerio que solamente existe en regímenes totalitarios por ser su único objetivo la intoxicación informativa, por lo que debiera titularse de Desinformación.

Dicho ministro se expresa en un inglés difícilmente inteligible, lo más opuesto "a magnifico y jugoso", por lo que pretender que es superior al de los militares norteamericanos, dejando aparte que los partes de guerra por militares no se prestan a florituras, me hace pensar que lo que I.G. hace es menospreciar el inglés americano.

Decir que "tenemos que aguantar" a estos últimos en la pequeña pantalla, es más de lo mismo y hasta patético pues no creo que nadie le obligue a hacerlo salvo que dé más crédito a la información dada por los americanos que resultaría lo más lógico.

Que las declaraciones del iraquí llegaran a producir "efecto devastador" de ser transmitidas por la televisión pública norteamericana es de morirse de risa. En ningún momento se nos explica la naturaleza de las declaraciones que, si no en USA, podrían informarnos los periodistas españoles. Repito, se trata de partes de guerra fantasiosos para hacer creer a su público que están ganando esta guerra como, según ellos, ganaron la anterior.

Afirmar que "este personaje, que lo es, y mucho, acude al sarcasmo o a la ironía que maneja con puntería mortífera" significa que el espíritu crítico de I.G. le ha abandonado, salvo que de esa manera interprete sus burlas al enemigo americano y no hay más que ver su rostro para comprender que es inmune a tales figuras retóricas pues bastante tiene con manejar sus fantásticas cifras y que podamos entenderlas.

Por último, el verdadero ministro de Defensa se llama Sultan Hashim Ahmad de quien no veo ninguna conferencia de prensa en BBC World, pero sí es comprobable que forma parte de los 10 criminales del entorno de Sadam Husein más buscados por la coalición, debido a su responsabilidad en las masacres de kurdos, kuwaitíes y chiítas.