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Climent denuncia que El Siglo costará 300.500 euros más por trabas del Consell

Ferran Bono

La asociación Acció Cultural del País Valencià (ACPV) denunció ayer que la Generalitat "ha hecho todo lo posible por dificultar" la compra de los antiguos almacenes El Siglo Valenciano para su conversión en un centro cultural y cívico. El secretario y la asesora jurídica de la entidad, Eliseu Climent y Mercè Teodoro, explicaron que la negativa de la Generalitat a que las fundaciones Josep Renau y Ausiàs March pudieran hacer frente a la compra de El Siglo ha originado la pérdida de alrededor de 300.500 euros (unos 50 millones de pesetas) en ventajas fiscales. De hecho, ha sido al final la asociación Acció Cultural la que se ha encargado de la adquisición del inmueble, formalizada definitivamente la pasada semana, por un coste de cerca de 3,3 millones de euros. La inversión total estimada, incluyendo la reforma arquitectónica y el equipamiento se eleva a unos ocho millones de euros.

Teodoro señaló que entiende que la Administración vele por el cumplimiento de la ley en una actividad social como las fundaciones, pero insistió en que también tiene que ser "razonable", por lo que estimó injustificable la negativa, teniendo en cuenta la "contrastada solvencia económica y cultural" de la Josep Renau y la Ausiàs March y el crédito hipotecario a 20 años concedido por Caixa Catalunya para la compra de los céntricos y valiosos almacenes, de estilo modernista y racionalista, cerrados hace 23 años.

Pero lo más grave del perjuicio causado, prosiguió la abogada, es que la "comunicación oficial de la denegación no se recibió hasta el 25 de marzo", cuando un medio de comunicación local publicó una información con el argumentario contrario casi exacto dos meses antes. Este hecho supone la "violación de las reglas y procedimientos administrativos porque se han hecho públicos datos absolutamente privados y así se ha incurrido en falta grave", añadió. ACPV recurrirá la resolución y pedirá responsabilidades.

Climent definió el proyecto cultural de El Siglo (que posiblemente se llamará El Segle) como la "casa común de la gente del país y de progreso" y de los movimientos cívicos y culturales, y recordó, junto al presidente de ACPV, Vicent Martínez Sancho, que ya hace años que se iba buscando una gran sede en Valencia. El coordinador de Acció Cultural, Antoni Gisbert, explicó que los 3.400 metros cuadrados de El Siglo se repartirán en dos partes: una pública y otra privada. En la primera (sótano, planta baja, primera y terraza) se creará un gran centro cultural y cívico y ofrecerá salas de exposición, teatro, cine, conferencias, cursos, servicios de cafetería y restaurante, en la segunda (planta segunda y tercera), se alquilarán espacios para múltiples asociaciones (Joan Fuster, ACPV, Josep Renau, la Assamblea de Regidors...) fundamentalmente del ámbito lingüístico catalán.

El proyecto básico ha sido diseñado por el arquitecto Carles Dolç y en el defintivo participarán también Oriol Bohigas, Alfred Payà y Frederick Climent. La intención es inaugurar el centro entre octubre de 2004 y abril de 2005. Al frente de la soceidad anónima de El Siglo estará un economista que llevará una "gestión de forma empresarial", agregó Climent. Está previsto el lanzamiento de una gran campaña que pretende implicar a "100.000 personas" para conseguir recursos económicos. También se van a pedir ayudas a distintas instituciones, incluidas las europeas.

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Sobre la firma

Ferran Bono
Redactor de EL PAÍS en la Comunidad Valenciana. Con anterioridad, ha ejercido como jefe de sección de Cultura. Licenciado en Lengua Española y Filología Catalana por la Universitat de València y máster UAM-EL PAÍS, ha desarrollado la mayor parte de su trayectoria periodística en el campo de la cultura.

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