¿Qué sucede en la Casa de Cantabria?
Ésta es la pregunta que muchos de los socios nos venimos haciendo desde hace tiempo. Como socio que soy, me envían una carta de convocatoria para la próxima asamblea, en la que se elegirá nuevo presidente. Tenemos deudas con la Seguridad Social que incluyen el pago de la cuota obrera, que, como todo el mundo sabe, es un posible delito; deudas con la Agencia Tributaria, que incluyen el impago de las retenciones del IRPF que la casa hace a los trabajadores y no ha sido ingresado en su momento (¿dónde está ese dinero?); impago en el salario de los trabajadores y retraso del pago de varias nóminas; deudas con los proveedores por una elevada cifra que no me han querido comunicar. O la cena de entrega de nuestro prestigioso premio Emboque de Oro; para asistir a esa cena los comensales pagamos alrededor de cinco mil pesetas. Cuál es mi sorpresa cuando veo que dicha cena todavía no se ha pagado. ¿Qué se hizo con el dinero que se recaudó esa noche? ¿Por qué no se pagó inmediatamente al hotel Bahía?
Como los trabajadores de la casa están muy preocupados, me hicieron un montón de comentarios; por ejemplo, que hemos perdido la declaración de utilidad pública, lo que supone que las instituciones y empresas que colaboran económicamente con nosotros ya no podrán realizar deducciones de impuestos. Que la Casa de Cantabria, 20 años después de su creación, aún no cuenta con licencia de actividad por parte del Ayuntamiento de Madrid y que tiene una orden de cierre que puede ejecutarse en cualquier momento.
Pero mi mayor sorpresa se produce al conocer que la misma persona que nos ha conducido a este gran desastre, que ha sido vicepresidenta durante seis años y presidenta en los seis últimos, es decir, que ha tenido la responsabilidad de nombrar al director general que ahora despide porque ya no le sirve. Cuando pregunto cómo es posible esto, me dicen que cuenta con el respaldo del Gobierno regional.
Por favor, demos la oportunidad para que alguien con savia nueva solucione los problemas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.