L'Entesa apuesta por ceder cuotas de poder a los ciudadanos en los gobiernos municipales

La coalición electoral constituida por Esquerra Unida, Els Verds y Esquerra Valenciana bajo el paraguas común de L'Entesa celebró ayer una convención municipal en Valencia donde proclamó una apuesta por la participación ciudadana en la gestión municipal y la cesión efectiva de cuotas de poder a los vecinos en los ayuntamientos. La propuesta de L'Entesa está en clara sintonía con los principios inspiradores del movimiento civil iniciado en la ciudad brasileña de Porto Alegre, que se ha convertido en una referencia clave del debate sobre la globalización.

El candidato de L'Entesa a la presidencia de la Generalitat se mostró convencido de que la coalición "va a ser la clave para cambiar en muchos municipios" de la Comunidad Valenciana. El ambiente que se respiró en la convención mostraba el notable optimismo de los presentes respecto a sus posibilidades en las próximas elecciones municipales y autonómicas.

Ribó se contagió, se permitió ir incluso más lejos y aseguró tener la sensación -"cada día más"- de que el cambio, tras las próximas elecciones municipales y autonómicas, "va a ser posible". En este sentido, Ribó lanzó una llamada más al Bloc Nacionalista para que asuma el compromiso de "conformar gobiernos progresistas después del 25 de mayo".

A este respecto, la responsable de Política Municipal de EUPV y candidata de L'Entesa a la alcaldía de Elche (Alicante), Àngels Candela, precisó que la misión de la coalición es, precisamente, "ser garantía de un cambio real, no simplemente para cambiar el PP por el PSOE", para "no permitir que se hagan políticas de derechas por parte de partidos con pedigrí de izquierdas". "El papel que juega L'Entesa", añadió, "es garantizar, precisamente, que haya cambios de verdad".

Todos los participantes destacaron la importancia de la participación ciudadana. Así, Ribó indicó que L'Entesa ha de contribuir a acabar con la expansión urbanística que está acabando con la huerta, a que haya ciudades que no obliguen a hacer muchos kilómetros en coche para ir al cine o comprar, y con un nivel de ruidos más bajos". "En conjunto", afirmó, "para hacer unas ciudades mucho más habitables".

Àngels Candela, por su parte, señaló que la participación directa de los ciudadanos "es un compromiso que nos obliga a dejar cuotas de poder en manos de la gente, para que esa participación ciudadana no se quede en un mero trámite, en un compromiso sin contenido".

La guerra desatada en Irak y la movilización de miles de ciudadanos anónimos que han tomado las calles para expresar su rechazo a la agresión bélica inspiró otra vertiente a la reflexión sobre la participación ciudadana.

Ribó condenó con rotunda severidad la agresión militar y siguió. "No obstante", dijo, "veo dos elementos para la esperanza: es la primera vez que en todo el mundo surge una movilización articulada contra la guerra. Si continuamos con las movilizaciones, en el futuro podremos evitar que los gobiernos democráticos emprendan nuevas guerras".

El paradigma de la movilización espontánea, el movimiento ciudadano Nunca Mais, surgido en Galicia a raíz del naufragio del Prestige y la posterior marea negra sobre toda la costa de la región, envió un representante a la convención.

"Nunca Mais también a la guerra", concluyó Ribó ante un auditorio en el que ocupaban un lugar destacado el representante de la plataforma ciudadana gallega, Xurxo Insua, y la de la plataforma valenciana de Actors i Actrius contra la Guerra, Carme Benlloch, y los alcaldes de Buñol y Macastre, Minerva Gómez y José Saez, respectivamente, quienes recibieron las mayores ovaciones de los asistentes.