Siza plantea el "diálogo" con la obra de Grassi para ampliar Tarongers
El proyecto culmina el área de servicios de un campus con 20.000 trabajadores y estudiantes
El arquitecto portugués Álvaro Siza presentó ayer en Valencia un proyecto para ampliar el campus de Tarongers de la Universitat en franco "diálogo" con la gran Biblioteca proyectada por su homólogo italiano, Giorgio Grassi, hace dos años. Con todo, la culminación de un área de servicios para atender a 20.000 trabajadores y estudiantes, pende ahora de la agilidad del Gobierno valenciano en reeditar un plan de inversiones que venció hace un año.
Siza volvió a hacer gala ayer del talante afable que le caracteriza al presentar, en conferencia de prensa con el rector Francisco Tomás, un proyecto que le fue encargado hace ya cuatro años con el objeto de culminar el área de servicios del campus nuevo que la Universitat de València proyectó hace una década en la avenida de Tarongers, y que hoy alberga a más de 20.000 trabajadores y estudiantes. Pese al evidente recorte sufrido sobre el encargo original (que incluía la edificación de la gran Biblioteca de Ciencias Sociales, que finalmente se encargó en solitario a Grassi por falta de presupuesto), Siza defendió una visión "integral" de la arquitectura y presentó un proyecto de construcción de cuatro edificios -un auditorio, un edificio de servicios y tiendas y la valiosa Hemeroteca universitaria sobre 15.000 metros cuadrados- con una franca vocación de "diálogo con la obra de Grassi" y de servir de "punto de encuentro" con el entorno. Bajo esa óptica, Siza conservará la fidelidad al "ladrillo rojo" y la "piedra calcárea" que dominan tanto en los aularios proyectados por Carles Salvadores, como en la emblemática biblioteca borgiana.
Con todo, el proyecto ejecutivo -que está listo para ser licitado con un coste de 2,5 millones de euros- puede volverse a ver relegado "si no existen garantías financieras para llevarlo a cabo", subrayó el rector Tomás. Tomás insistió en "la necesidad de desarrollar un nuevo plan de inversiones, porque el actual está agotado" y recordó al Consell que la Universitat ya tuvo que aplazarlo para "cubrir necesidades más acuciantes como aulas y departamentos", similares a las que enfrenta hoy ante el nivel de deterioro de los edificios de Magisterio, Ciencias Sociales y Psicología.
Paralelamente, Siza, que obtuvo en 1992 el Premio Pritzker (considerado el Nobel de la Arquitectura), expone hasta el 8 de junio en el histórico edificio de La Nau, una muestra de toda su arquitectura universitaria y una selección de dibujos de viajes realizados en sus 70 años de vida.
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