Moreno pide al PSOE que arriesgue y huya del inmovilismo "ávido por atesorar votos"
La vicesecretaria socialista dice que sólo los localismos explican que no haya caja única
Clara, rotunda y sin autocomplacencias. La vicesecretaria general del PSOE de Andalucía, Mar Moreno, reivindicó ayer en una conferencia en el Club Antares de Sevilla y ante la plana mayor de su partido "el valor del riesgo de la iniciativa" en la política andaluza y defendió la necesidad de que el PSOE impulse "nuevas reformas", arriesgue y no preste "atención a quienes desde el inmovilismo sugieren administrar el caudal de confianza ciudadana como lo haría un banquero opulento y conservador, ávido por atesorar votos y preocupado sólo por no perderlos".
La conferencia de la vicesecretaria general del PSOE había despertado una expectación infrecuente en el partido socialista. No sólo porque la presentó el presidente de la Junta y secretario general del PSOE, Manuel Chaves -quien no se prodiga en estos menesteres-, sino porque en el complejo partido socialista su irrupción ha generado otra dinámica de trabajo, la cual, a su vez, provoca recelos en los sectores más instalados.
El lleno fue total en el Antares. El Gobierno, casi en pleno; los ocho secretarios provinciales del PSOE; miembros de la ejecutiva federal y cuatro presidentes de cajas de ahorros. La presencia de todos ellos avala, como dijo Manuel Chaves en su presentación, que se intuye que Moreno "es una política con mayúsculas, con vocación de liderazgo".
Sus palabras, por tanto, fueron seguidas con mucha atención. Moreno habló claro y con rotundidad. "Andalucía", dijo, "se encuentra en un cambio de ciclo marcado por la apertura de nuevas oportunidades para la convergencia y por la existencia de un nueva ciudadanía andaluza". Moreno aseguró que la política debe "canalizar" esa nueva ciudadanía emergente y para ello debe recuperar "prestigio social" mediante la pedagogía política, la cual requiere "valentía para soportar el desgaste de expresar muchas veces lo que la gente no quiere oír", como en los asuntos referidos a la inmigración.
También sin dobleces se posicionó contra los nacionalismos y los localismos. "Andalucía necesita inteligencia andaluza insobornable por la presión del localismo", dijo Moreno, quien defendió la necesidad de una caja única -"es muy difícil entender, si no es bajo la presión del localismo, un modelo de seis cajas provinciales"- y una mayor especialización de las 10 universidades andaluzas. La vicesecretaria socialista aseguró que el PSOE debe dar "respuesta a las exigencias de la nueva ciudadanía andaluza" e incorporar "el riesgo de la iniciativa como un valor de la izquierda". A su juicio, la Administración autonómica "tiene que saber que arriesgándose a perder es como puede ganar más", por lo que "la solvencia económica no puede seguir siendo el factor determinante de la concesión de ayudas públicas", al tiempo que aseguró que "la complejidad administrativa no es un acicate para el emprendimiento".
También dejó claro "que no piensa dejar el hueco a ninguna formación política" respecto a la defensa del medio ambiente, en clara alusión a Los Verdes, con el que el PSOE mantiene un acuerdo de legislatura.
Moreno se mostró convencida de que la alternativa política al PSOE de Andalucía puede seguir siendo el propio PSOE. "Por eso reivindico el valor del riesgo de la iniciativa. Precisamente ahora que las encuestas ratifican el apoyo mayoritario al partido socialista. Ahora es cuando más margen tenemos para impulsar nuevas reformas", dijo Moreno, quien pidió no prestar atención "a quienes desde el inmovilismo" sólo se preocupan "por atesorar votos".
La dirigente del PSOE, en clave interna, subrayó que no actuaba en solitario. "Creo interpretar fielmente la voluntad de mi secretario general al huir de toda complacencia y defender un proyecto que lejos de caer en el inmovilismo, persiga la evolución y la síntesis".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.