Catorce alcaldes de Huelva se encierran para exigir ayudas para los mineros

Catorce alcaldes de la Mancomunidad de El Andévalo (Huelva), la mayoría del PSOE, iniciaron ayer un encierro indefinido en el salón de plenos del Ayuntamiento de Calañas, para reivindicar que el Gobierno central aplique sin demora su plan de ayuda a los mineros de la provincia onubense. Fernando Recio, portavoz de los alcaldes y regidor de Calañas, no considera suficiente el compromiso de la Subdelegación del Gobierno en Huelva, contraído la pasada semana con los sindicatos, de trabajar sobre las certificaciones individuales de los mineros. "Llevan prometiendo lo mismo desde hace un año. Que siguen trabajando y trabajando. Pero pasan los meses y no hay respuesta. No podemos esperar más. Los pueblos y las comarcas de Huelva que han vivido siempre de la minería están en muy mala situación. Queremos los datos", afirmó.

Los alcaldes encerrados, que representan a unos 25.000 vecinos, exigieron ayer al Gobierno central "que ponga inmediatamente sobre la mesa lo acordado el pasado 11 de septiembre por el Foro de la Minería Metálica de Andalucía", las medidas sociolaborales de ayuda a los mineros.

Los sindicatos también exigen que se apliquen coeficientes similares a los que se usaron para la crisis de Boliden Apirsa, en Aznalcóllar (Sevilla), que dejaron la edad de prejubilación en 50 años. En Huelva hay 1.300 trabajadores afectados por la crisis del sector, de los que 835 pasarían a situación de prejubilados.

Mientras, unos 30 mineros, todos de UGT, prosiguen con el encierro en la catedral de Huelva iniciado el tres de febrero. José Carlos Torres, portavoz sindical, afirmó ayer: "Los mineros, de momento, han levantado el pie del acelerador de las movilizaciones, pero continúan expectantes". Los sindicalistas tienen previsto mantener a mediados de marzo una reunión con representantes de los Gobiernos central y autonómico para evaluar la marcha de los trabajos sobre las prejubilaciones.