Los pueblos próximos a la base de Morón exigen un plan de emergencia

Los alcaldes de los municipios más próximos a la base militar de Morón de la Frontera exigen al Gobierno central que elabore un plan de emergencia aplicable en caso de accidente o conflicto internacional. Los representantes de PSOE, PA, IU y Grupo Mixto de la Diputación apoyarán hoy una moción por la que instan al Ejecutivo a contactar con la Junta y los ayuntamientos para acordar un protocolo de actuaciones.

Los alcaldes de Algámitas, Arahal, Coripe, El Coronil, Montellano, Morón, Pruna y Puebla de Cazalla lamentan que nadie del Gobierno les informe del uso de la base, a pesar de que "se perciben preparativos equiparables a una situación prebélica". "A nosotros no nos hace falta ver los Telediarios", asegura el alcalde de Arahal, el independiente Manuel Brenes, "sabemos cuándo hay conflicto porque nos pasan por lo alto todos los aviones".

La moción que previsiblemente aprobará hoy el pleno de la Diputación consta de tres puntos: en el primero, se ratifica un acuerdo del pleno de febrero que advertía que el Gobierno "no debe autorizar el uso de las bases españolas" y que "debe informar al presidente de la Junta y a los alcaldes de Morón, Arahal, Coronil y Puebla de Cazalla de cuantas operaciones se estén realizando".

En el segundo punto, los grupos exigen al Gobierno que elabore "concertadamente" con la Junta y los ayuntamientos un plan de emergencia y un protocolo de actuaciones con las medidas que tienen que adoptar estos municipios en caso de que "sus núcleos urbanos, sus ciudadanos o su medio ambiente se vean afectados ante una situación de emergencia derivada de accidente, atentado o conflicto internacional". Por último, la Diputación se compromete a trasladar estos acuerdos a la Presidencia del Gobierno y a la de la Junta.

El vicepresidente de la Diputación, Manuel Copete, considera que el aislamiento de España al apoyar la intervención militar frente a la postura generalizada en la Unión Europea, así como el rechazo de otros países a que se utilicen sus bases, hace que las instalaciones de Morón adquieran más protagonismo y que la situación sea "más delicada que nunca". "Esto no es una declaración de intenciones", subrayó Copete, "sino una carta política para que se tomen medidas ya".