Tanda de mínimos
Los mercados de valores volvieron a exponer ayer su debilidad ante una coyuntura compleja y algunos índices europeos cayeron hasta los niveles mínimos del año, el de la Bolsa de Madrid entre ellos.
La simple enumeración de las circunstancias que soportan las tomas de decisiones en las bolsas resulta apocalíptica y son cada vez menos los analistas que pronostican reacciones a medio plazo y que, consecuentemente, recomiendan asumir algunos riesgos. De hecho, el dinero institucional continúa dirigiéndose hacia los mercados de deuda, en los que los precios alcanzan máximos debido a la presión compradora y las rentabilidades caen a los niveles mínimos de los cinco últimos años.
El Ibex 35 perdió ayer el 2,50%, para cerrar en 5.803,20 puntos, apenas 15 por encima del nivel mínimo del año, mientras que el índice general de la Bolsa de Madrid cedía el 2,40% y se situaba en mínimos anuales. París perdió el 3,67%, y Francfort bajaba el 3,96% poco antes del cierre, lo que también situaba a estos dos mercados en mínimos anuales. Londres bajó el 2,17%.
La Bolsa de Nueva York también caía arrastrada por el índice de confianza de los consumidores de febrero, que registró la mayor caída mensual desde septiembre de 2001 y rompió todos los pronósticos por la debilidad del mercado laboral, las pérdidas en las bolsas, el encarecimiento del precio de los combustibles y la creciente amenaza de guerra y ataques terroristas. El índice Dow Jones bajaba el 0,98% a media sesión y quedaba por debajo de los 7.800 puntos, muy cerca de los niveles mínimos anuales.
La contratación en el Mercado Continuo mejoró gracias a la absorción de papel, alcanzando los 1.367,07 millones de euros, un 30% más que el día anterior.
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