Obras de arte de quita y pon
Art to Rent promociona artistas noveles con el alquiler de sus cuadros
La casa-despacho de Leticia Hervás tiene un aire especial. La solemnidad de este ático en el centro de Madrid ha sido rota por chillones colores rojos y ocres en las paredes, de donde cuelgan grandes cuadros de pintura moderna. Leticia, 30 años, trabajaba en una galería de arte y hace poco más de un año empezó a montar con otro socio, Miguel Luis González, de 28, un negocio extendido por EE UU y Europa, pero apenas conocido en España: el alquiler de obras de arte. Art to Rent, que así se llama la sociedad de estos emprendedores, empezó a facturar el pasado septiembre y, de momento, ha conseguido cubrir ya la inversión realizada, que ascendió a 25.000 euros. Su objetivo es doble: extender el alquiler de arte y dar una nueva salida a la producción de artistas jóvenes.
El primer contacto con el cliente se establece con un catálogo que recoge 1.000 obras de más de un centenar de artistas
Al margen de particulares, Art to Rent tiene entre sus principales clientes consultoras, hoteles, despachos de abogados, inmobiliarias y productoras cinematográficas. Los cuadros, esculturas o fotografías que alquilan decoran desde pisos pilotos a spots publicitarios y pueden permanecer en ellos desde unas horas hasta meses, o años.
La empresa, según Hervás, establece el primer contacto con el cliente a través de un catálogo que recoge 1.000 obras de más de 100 artistas y que se renueva periódicamente con la ayuda de catedráticos de Bellas Artes. El cliente explica el espacio que pretende decorar y, si hay acuerdo, se firma un contrato que incluye, además del asesoramiento, todo lo relacionado con el seguro, embalaje, enmarcación, transporte... y termina con el montaje y acondicionamiento de la obra.
¿Qué prefieren los clientes?, según Leticia Hervás, pintura. Figurativa los particulares y abstracta las empresas. Los contratos de alquiler varían desde los 10 euros mensuales a los 180 y durante su vigencia se puede sustituir, por un pequeño coste, la obra alquilada, que para las empresas es una inversión que desgrava fiscalmente.
Art to Rent alquila, y da también opción de compra, obras de artistas consagrados como Chillida, Tàpies, Lucio Muñoz o Canogar, pero tiene entre los noveles su filón principal. De momento, la empresa trabaja en Madrid, Galicia, Palma, Barcelona, Córdoba y Sevilla.
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