El PP acusa al alcalde de Marbella de presionar para retirar su propaganda
El PP acusó ayer al alcalde de Marbella, Julián Muñoz (GIL), de "amenazar" a la empresa Portillo con rescindirle la concesión del servicio de transportes de la ciudad si no retiraba la publicidad electoral del PP contratada en sus autobuses. La candidata del PP a la alcaldía, Ángeles Muñoz, mostró un comunicado de la agencia de publicidad Allo, en el que sus responsables exponen que el 12 de febrero, el gerente de Portillo, Julio de Marco, recibió una llamada del coordinador municipal de Transportes de Marbella en la que le ordenaba "retirar toda la publicidad del partido político PP de los autobuses contratados, o de lo contrario le retiraría a Automóviles Portillo toda la concesión de los autobuses urbanos". "No hubo otro remedio que quitar toda la publicidad", añaden. El alcalde negó haber presionado a Portillo, y aseguró que "el único contacto" con la compañía fue para solicitar la inserción de publicidad del GIL. Añadió que el gerente le transmitió que la norma de la empresa es no colocar propaganda política, y que Allo había instalado el anuncio sin la conformidad de Portillo, lo que motivó su retirada.
