La vía de circunvalación quedó cortada cinco horas

El Servicio Especial de Limpieza Urgente (Selur) recogió ayer un total de 9.000 litros de gasóleo de calefacción derramados en la calzada por el camión cisterna de la empresa concesionaria de Cepsa involucrado en el accidente ocurrido en la M-30. El Selur, activado por los bomberos del Ayuntamiento y la Policía Municipal tras conocer el suceso, desplazó al lugar del accidente a ocho trabajadores y cuatro vehículos que, con desengrasantes y baldeo, junto a la espuma vertida por los bomberos, limpiaron el gasóleo derramado en la calzada.

El trabajo de limpieza fue efectuado en menos de una hora y concluyó a las 14.45, según las mismas fuentes. Cepsa, según informó un portavoz de la compañía, envió al lugar del choque un equipo de expertos para poder sacar el gasóleo de calefacción, 15.000 litros de una capacidad total de 20.000, que transportaba la cisterna en el momento del accidente.

Producto no peligroso

El producto, según el mismo portavoz, no es "peligroso", y el vehículo, propiedad de Petrolífera de Transportes, iba a media capacidad, puesto que había comenzado el reparto del combustible por diferentes casas.

El carril derecho de la carretera de circunvalación M-30, escenario del accidente, se abrió al tráfico a las 16.20. La Policía Municipal permitió circular de nuevo por el carril izquierdo y central de la vía de circunvalación a las 18.00, momento en que terminaron las labores de limpieza del gasóleo.

El punto donde ocurrió el mortal suceso de ayer ya fue escenario de un accidente en el que resultaron heridos 11 jóvenes turistas estadounidenses. El accidente se produjo el sábado 28 de marzo de 1999, cuando un autocar de la empresa Samar volcó a la altura del kilómetro 19, en el sentido contrario al que se produjo el choque de ayer.

Sin embargo, el accidente más grave registrado en los últimos años en la M-30 se produjo el 28 de diciembre de 1990, cuando murieron 12 personas y resultaron heridas otras 25. Un autocar que cubría la línea Madrid-Vigo chocó contra un poste de cemento que sostenía los carteles informativos en el nudo de Puerta de Hierro. Un posible exceso de velocidad fue la causa de este siniestro, en el que también concurrieron la falta de peralte de la curva y la mala señalización de la zona.

En febrero de 1990, dos estudiantes de Vélez-Málaga, de 18 y 20 años, murieron en un accidente en la confluencia de la carretera de Andalucía con la M-30 al salirse el autocar en el que viajaban de la calzada.