Los niños de La Rinconada cuyo padre fue acusado de abuso irán a un centro

El juez Antonio Vega, del Juzgado número 17 de Barcelona, ordenó el 24 de enero, en un auto conocido ayer, el ingreso de los niños Alberto y Sara Cabrera Góngora, de 9 y 7 años, en un centro de menores de la Generalitat de Cataluña. En el escrito, en el que asume la petición de la Fiscalía, el magistrado otorga la guarda y custodia de los menores a la Administración catalana y solicita a la Guardia Civil que localice a los chicos en San José de la Rinconada, o dónde "pudieran hallarse", y los ponga a disposición de la Generalitat.

La resolución judicial forma parte del proceso abierto tras la denuncia por abuso sexual de los niños que la madre, Lourdes Góngora, presentó en 1997 contra su ex marido, José Manuel Cabrera. Góngora se trasladó en diciembre a San José de la Rinconada, en Sevilla, donde mantuvo un encierro durante tres semanas.

En la fundamentación del auto, el juez afirma que a la madre se le han dado "todo tipo de facilidades y garantías" para que los niños cumplieran un régimen mínimo de visitas con el padre, pero que ésta, "incomprensiblemente" se ha negado a acatarlo y se ha trasladado a Sevilla con ellos.

El magistrado explica que lo más fácil sería esperar a que los chicos cumplan 18 años y decidan, pero el padre reclama su derecho y, no existiendo "acusación ni imputación alguna contra él" -por haber sido archivada la denuncia de la madre-, ni teniendo garantía de que "los menores sigan la terapia o tratamiento psicológico que necesitan", según varios informes periciales, no puede "mirar hacia otro lado".

El juez prefiere no entregar la custodia al padre, como tenía previsto, ya que, en tal caso, Alberto ha amenazado con suicidarse. El magistrado se pregunta: "¿De dónde pueden venirle esas ideas suicidas si hace más de año y medio que no ve a su padre?"

Vega afirma que los niños afrontan un "riesgo potencial" cuya única solución es el tratamiento psicológico "fuera del actual núcleo familiar" para quitar a los menores "esas ideas suicidas que tienen metidas en la cabeza por la demonización a que tienen sometida la figura paterna".

Fuentes cercanas a Góngora aseguraron ayer que la madre se encuentra "destrozada" y que sus abogados ya preparan un recurso contra el auto dictado. Por ahora, según las citadas fuentes, la Guardia Civil aún no ha procedido a la localización de los menores.