Los errores en la redacción de las actas fuerzan una nueva suspensión del juicio del 'caso Bazar España'

Fiscalía, acusaciones y defensas del caso Bazar España estuvieron ayer de acuerdo en algo: las actas de las sesiones previas del juicio no había quien las entendiera. La tarea del taquígrafo, considerado uno de los mejores de España y expresamente contratado en Madrid por la Consejería de Justicia para este caso, resulta "confusa, ilegible y mal redactada", según los letrados. El juez, Rafael Tirado, acordó ayer la suspensión de la sesión prevista para que entre el fiscal y los 15 abogados intentaran reconstruir la declaración del arquitecto Luis Recuenco en las jornadas precedentes. La Audiencia de Sevilla solicitó ayer a Justicia la instalación urgente de un sistema de vídeo para grabar el resto del juicio a partir de hoy.

El abogado del propio Recuenco, Manuel Soto, solicitó en nombre de sus compañeros tanto de las acusaciones como de las defensas la suspensión de la sesión porque "no se entiende lo que dice el acta". Tanto el juez como el fiscal estuvieron de acuerdo en intentar solventar el problema ya que, de continuar, podría llegar a causar indefensión ante un posible recurso posterior.

Las declaraciones contenidas en las actas oficiales son sobre las que se sustentan las posteriores apelaciones. Luis Recuenco y otros seis acusados son juzgados por el derrumbe de un muro que causó cinco muertos el 31 de diciembre de 1998.

La redacción de las actas es alarmante, según los letrados. Soto, ratificado por otros compañeros, explicó que la transcripción de la declaración de Recuenco era "ilegible, mal redactada, con palabras extrañas y sin relación entre sí". "Parece árabe o griego", decía.

En las actas se puede leer como el taquígrafo llama a la calle San Juan Bosco "microbosco", por ejemplo. Uno de los surrealistas párrafos dice literalmente: "Se adhier a la impuglagmente o frazones procesales y por oportune esas prueypas corresponen a hechos en relacionados con este causa".

El juez, en el momento de suspender la vista, pidió disculpas públicamente por la responsabilidad del Juzgado en los errores cometidos. Posteriormente explicó que el estenotipista, un invidente formado en la Fundación Once, tenía problemas con el contenido técnico y jurídico de las sesiones ya que era el primer juicio al que asistía profesionalmente.

Fuentes de la Consejería de Justicia afirmaron ayer que no habrá problema para que el resto del juicio sea grabado desde hoy mismo en tecnología DVD, un sistema del que ya disponía el salón de plenos de la Audiencia pero que no había sido activado en esta ocasión.

La circunstancia que causó ayer el aplazamiento podría considerarse una mera anécdota si no se tratara de la enésima dificultad con la que se encuentra el desarrollo de este, ya de por sí, fragoso juicio. Antes del inicio de la vista oral hubo que cambiar de juez porque a quien le tocó por reparto resultó ser hija del jefe de los servicios jurídicos del Ayuntamiento.

La pasada semana hubo que suspender temporalmente la vista porque el secretario judicial fue reclamado por su juzgado para la comparecencia de un preso. Y ahora, la ilegibilidad de las actas. Tirado baraja ya la necesidad de convocar sesiones extras del juicio para no sumar más retrasos a los tres meses ya previstos de vista oral.