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Etiquetado de productos con un 0,9%

Las nuevas normas de etiquetado se aprobaron en diciembre por los ministros de Agricultura y Medio Ambiente, pero deben aún ser votadas en el Parlamento Europeo. Con ellas se combate con información el rechazo de los consumidores europeos. "Esta nueva ley garantiza aún más la capacidad de elección del consumidor mediante el etiquetado de los derivados de organismos genéticamente modificados (OMG) (...). Creo firmemente que nuestros ciudadanos necesitan ser capaces de elegir", declaraba el comisario de Salud, David Byrne.

La normativa vigente desde 1997 ya obliga al etiquetado. Todo alimento con más de un 1% de derivados de OMG debe indicarlo en la etiqueta, pero sólo cuando la presencia de dicho ingrediente pueda detectarse. Este punto es clave, porque los derivados de transgénicos sólo se detectan si hay proteínas. O sea, un aceite de colza transgénico -que sólo es grasa- hoy no se etiqueta. Tampoco tienen que etiquetarse específicamente hoy los transgénicos y derivados para consumo animal.

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Derivados

La nueva norma cambia lo anterior. Exige el etiquetado de productos con más de un 0,9% -antes era un 1%- de derivados de OMG, aunque la proteína transgénica en cuestión no pueda detectarse. Un bollo elaborado con muy poco aceite de soja transgénica deberá indicarlo claramente en la etiqueta. Lo mismo vale para los piensos animales, aunque no así para los derivados de esos animales: los huevos de una gallina alimentada con transgénicos no llevarán etiqueta específica.

También se introduce un umbral para la presencia accidental de derivados de OMG no autorizados en Europa. No llevarán etiqueta especial productos con menos de un 0,5% de éstos, siempre que los comités científicos asesores de la Comisión Europea hayan informado favorablemente. Según Byrne, "durante el cultivo, cosecha, transporte y procesado pueden aparecer trazas de OMG en la comida y los piensos convencionales. Es una realidad nos guste o no (...). Hoy es prácticamente imposible obtener productos 100% puros. El objetivo de la UE es asegurar la legalidad y establecer umbrales".

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