La directiva del Barça presiona a Gaspart para que eche a Van Gaal

La continuidad de Louis van Gaal como entrenador del Barcelona está de momento garantizada por el presidente, Joan Gaspart, responsable único el pasado verano del regreso del técnico holandés contra el criterio de la mayoría de sus vicepresidentes. Los coroneles, como se conoce a los miembros de la cúpula directiva desde la última renovación de la junta, son más reacios a ratificar a Van Gaal y en determinados casos no descartan un relevo. Ràdio Barcelona incluso informó ayer de que varios directivos, la mayoría de los cuales ya se oponía a su continuidad antes y después de la goleada al Mallorca, tratarán de persuadir esta semana a Gaspart de la necesidad de un cambio en el banquillo azulgrana, en cuyo caso el club debería abonar seis millones de euros a Van Gaal en concepto de indemnización.

El holandés continúa confiando en Gaspart y en sus jugadores, quienes le defienden más que nada por entender que no es de su competencia decidir sobre la capacidad de un entrenador fichado por el presidente. Gaspart considera que el problema no es sólo del técnico, sino también de la plantilla, de manera que un cambio de preparador no garantizaría la remontada. Las alternativas a Van Gaal, por lo demás, no son demasiado seductoras, hasta el punto de que en la junta se ha pensado que debería ser alguien de la casa el encargado de reconducir la situación.

Asamblea imprevisible

La directiva está igualmente preocupada por el escenario que se prepara para la asamblea de socios compromisarios anunciada por Gaspart y en la que el presidente tiene previsto someterse a una moción de confianza vinculante. La junta se reunirá el 3 de febrero para decidir la fecha de celebración de la misma, aunque no hay que descartar la posibilidad de que se retrase a final de curso o se anule. Hay directivos que entienden que su celebración puede ser contraproducente por el clima de tensión que se ha generado en el Barça. La alternativa que proponen es que Gaspart se comprometa a anunciar su dimisión al término de la temporada si no se cumplen los objetivos deportivos.

"La imprevisibilidad del presidente no permite asegurar nada", declaró uno de los directivos más próximos a Gaspart. A tal efecto, algunos miembros de la junta aún recuerdan cómo, en un momento en que necesitaba un gesto para reafirmarse, el presidente renovó a Puyol por su cuenta y riesgo, saltándose los márgenes económicos y cualquier recomendación de sus compañeros de directiva.

Por otra parte, el secretario general de Deportes de la Generalitat, Josep Maldonado, y el Colegio de Periodistas de Cataluña reclamaron ayer al Barcelona que extreme las medidas y garantice la seguridad en el Camp Nou. Los incidentes violentos se están sucediendo con frecuencia en el estadio en las últimas semanas. Los últimos se produjeron el pasado sábado, a la conclusión del partido con el Valencia, cuando un grupo de exaltados originó una batalla campal en el vestíbulo del palco.