Zaplana incumple el plazo para su propuesta sobre el subsidio agrario

El plazo de 10 días al que se comprometió el ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, para enviar su última propuesta sobre subsidio agrario a los presidentes andaluz y extremeño se cumplió ayer. Pero el documento, con el que el ministro confía en cerrar el conflicto con los sindicatos, no fue enviado. Y UGT y CC OO, que han convocado una huelga general en el medio rural de Andalucía y Extremadura para el próximo 20 de febrero, reaccionaron con dureza.

El secretario extremeño de UGT, Miguel Bernal, censuró la "incapacidad" de Zaplana para cumplir su palabra. "Son incapaces de llevar a cabo lo que proponen porque ni ellos mismos se creen lo que dicen", afirmó. Por su parte, el secretario andaluz de CC OO, Julio Ruiz, aseguró ayer que un incumplimiento en los plazos por parte de Zaplana "no preocupa" a los sindicatos, porque no se consideran "en clave negociadora", informa Esther Rodríguez. "No estamos a la espera de nada, estamos trabajando para la huelga", dijo Ruiz.

Zaplana, en una entrevista con los sindicatos el día 4 y otra el día siguiente con Manuel Chaves, presidente de la Junta de Andalucía, y Juan Carlos Rodríguez Ibarra, presidente de la Junta extremeña, expuso verbalmente su última propuesta: que los jornaleros andaluces y extremeños que han quedado fuera del subsidio agrario desde el decretazo de mayo de 2001, tengan la posibilidad de acceder a una ayuda equivalente al subsidio (330 euros al mes durante medio año por un mínimo de 35 peonadas), renovable año a año. Los sindicatos se opusieron a esta medida por entender que se sustituía un derecho (el subsidio) por una renta asistencial que dependía del visto bueno de la Administración y que impide cotizar para la pensión.

Optimismo de Ibarra

En estos últimos días, Zaplana ha enfatizado que esas diferencias pueden enjugarse en el documento que plasme su última oferta. Una fuente del ministerio aseguró ayer que la propuesta estará lista "a finales de la próxima semana o principios de la siguiente" y que el retraso se debe a "estudios complementarios que han solicitado los técnicos" para elaborar la norma en la que se concretará la oferta del ministro.

Los presidentes autonómicos se mostraron mucho más cautos que los sindicatos, e incluso esperanzados en la resolución del conflicto. "Espero buenas noticias", dijo Rodríguez Ibarra, quien habló el martes con Zaplana. "Estamos en una situación política muy delicada, ya que hay muchos candidatos a la sucesión en el partido popular y esto obstaculiza la solución al problema, pero creo que se podrá arreglar", agregó el presidente extremeño. Manuel Chaves reiteró que la Junta andaluza no tendrá una postura definitiva hasta recibir el documento y restó importancia al retraso.