Los grupos parlamentarios incrementan un 102% las preguntas al Gobierno en esta legislatura

Las iniciativas de control al Gobierno han crecido de manera espectacular en los dos años y medio de la VI legislatura. A fecha 13 de diciembre, las preguntas escritas en el Parlamento se han incrementado en un 102% respecto al volumen completo de la etapa anterior y en un 131% si se analizan los mismos periodos. La Consejería de Relaciones Institucionales atribuye el aumento a lo que denomina "preguntas-fotocopias", es decir, inquirir la misma información por provincias, por comarcas, pueblo a pueblo, barrio a barrio, año a año y consejería por consejería. La oposición defiende su derecho a plantear las cuestiones que quiera y se queja de la calidad de las respuestas. "El Gobierno", dicen al alimón PP e IU, "jamás se moja".

El grupo popular, con 46 diputados (seis más que en la legislatura pasada), ha presentado un 110% más de preguntas escritas en lo que va de periodo parlamentario que en el total del anterior; mientras que IU, con sólo seis diputados (siete menos), ha aumentado su producción en un 106%.

El 30 de agosto de 2002 a las 12,37 horas, siete diputados del PP, encabezados por el motrileño Carlos Rojas, presentaron 69 preguntas en el registro sobre la rehabilitación o construcción de edificios judiciales. Rojas tiene asentados a lo largo de la legislatura lotes idénticos de cuestiones de la aplicación del plan Adriano o las acciones de seguridad e higiene en el trabajo en cada una de las salas judiciales de la comunidad desagregadas territorialmente.

Igual sistema emplea el portavoz de IU, Antonio Romero, quien usa una plantilla tipo para preguntar, por ejemplo, sobre las guarderías infantiles, los centros públicos concertados o la evolución del empleo de la mujer en cada una de las ocho provincias, aunque la mayoría de las veces utiliza la división comarcal para "seguir la pista de las inversiones y luego hacer estudios comarcales", afirma.

En la secretaría general de Relaciones con el Parlamento, que dirige el andalucista José Luis Villar, las llaman "preguntas-fotocopias", ya que en muchos casos la cuestión a conocer es la misma y sólo cambia el ámbito geográfico. Así se puede llegar a preguntar, por ejemplo, sobre la situación de los colegios de primaria en toda Andalucía, en cada una de las ocho provincias, en cada comarca o en cada localidad y así como con cada servicio o centro público. Hay diputados, como el popular Rafael Salas, que ha preguntado sobre inversiones de la Junta en seis barrios de la ciudad de Sevilla.

El problema para Relaciones con el Parlamento es el enorme papeleo que genera cada expediente. "Tienen el mismo trabajo administrativo un pregunta-fotocopia que otra que no lo es", asegura Villar. "Respetamos la libertad que tienen los grupos de plantear las preguntas que estimen oportunas, pero sería conveniente que mejoran la calidad, igual que exigen más calidad en las respuestas del Gobierno", advierte. A su juicio, la labor de control del Gobierno "no se deben de medir nunca por criterios cuantitativos".

La visión de la oposición es diametralmente opuesta. "Es un derecho del diputado, el único medio de control que tiene sobre el Gobierno y es una falta de respeto calificarlas de fotocopias", asegura el secretario del grupo popular, Rafael Salas. En el caso del PP, asegura, las preguntas escritas las deciden los propios diputados -por las denuncias y quejas que reciben de colectivos ciudadanos- o por la línea política a seguir. A este último criterio responden las 1.078 iniciativas firmadas por la granadina Carolina González Vigo sobre la empresa pública Egmasa.

Salas, además, pone el acento en la influencia que tiene en la difusión del trabajo parlamentario las televisiones locales. Según el censo de la Asociación de Investigación de Medios de Comunicación, Andalucía cuenta con 283 televisiones locales. Las preguntas y sus respuestas acaban, salvo excepciones, en las papeleras de los periódicos, pero en "la televisión local te pueden abrir el informativo con una pregunta sobre los pinsapos de Ronda", proclama el portavoz de IU.

Romero se indigna cuando de manera solapada lo acusan de calcar asuntos para obtener el récord de mayor número de cuestiones presentadas, como el que ya logró en su etapa en el Congreso. De las 1.878 preguntas de IU, el 70% son suyas. "En Málaga hay siete comarcas, hay 13 consejerías y tengo que preguntar año a año por las inversiones, porque una cosa es lo que anuncian los consejeros y otra, el gasto real", comenta Romero, quien también cubre las provincias de Huelva y Almería, donde su grupo no obtuvo representación. Romero señala al diputado del PP por Málaga, Juan Ramón Casero, de quien dice "se ha pasado pueblo a pueblo".

Alude Romero al hecho de que el pasado 17 de septiembre Casero compulsó a las 11.15 horas en el Registro del Parlamento un total de 91 preguntas sobre las inversiones realizadas por las 13 consejerías en siete municipios malagueños. Las 91 estaban redactadas de la misma manera, sólo cambiaban los nombres de los departamentos y los de las localidades. En días sucesivos anotó otras 169 con los mismos temas sobre otros 13 ayuntamientos. ¿Cuál era su objetivo? "Muy sencillo", afirma Casero: "Se acercan las elecciones municipales y quería tener información del propio Gobierno sobre las inversiones de la Junta en los 20 municipios de Málaga de más de 10.000 habitantes".