El colista escama al Barça

En otras condiciones, la visita del Recreativo, el colista de la Liga, sería esperada con fruición en el Camp Nou. Pero el Barcelona afronta su primer partido de 2003 (17.00, Teletaquilla) en una situación inédita. El equipo azulgrana es el décimo en la clasificación y aún no ha cicatrizado la herida que acabó de abrir la goleada que sufrió ante el Sevilla. Sólo la contundente victoria en Mallorca, una semana después, frenó la destitución de Louis van Gaal, el técnico. Pero la afición está cansada de los malos resultados -cinco derrotas y cuatro empates en 15 encuentros- y también de una crisis institucional que castigó con una pañolada y gritos de dimisión contra el presidente, Joan Gaspart, el 15 de diciembre. No obstante, estos días ha fracasado la iniciativa de una moción de censura contra el dirigente.

El partido contra el Recreativo se contempla como otra prueba de alto riesgo para el Barcelona. Van Gaal advirtió ayer de un peligro que, dada la diferencia entre un equipo y otro, no debería existir. El entrenador holandés se puso en guardia y, más que en su pobre bagaje de nueve puntos y 31 goles recibidos, habló de los alardes del conjunto onubense, capaz de empatar con el Deportivo y de adelantarse por dos goles en el Bernabéu, donde acabó perdiendo por 4-2. "Todavía estamos por debajo de nuestro nivel", comentó Van Gaal; "pero debemos ganar con más contundencia que nunca. En estas circunstancias, no podemos perder contra el último, aunque muchas veces lo hemos hecho, y no sólo bajo mi dirección, sino también bajo la de Robson y la de Cruyff".

Van Gaal argumentó que si su equipo ha sido el que ha disfrutado de más días de vacaciones navideñas se debe a su intento de que los jugadores "desconectaran" tras la tensión de las últimas semanas. Después deslizó que los dos primeros entrenamientos de la semana no fueron de su agrado, pero añadió que en el de ayer sí le satisfizo la ambición y la forma en que se desevolvieron sus hombres.

La duda de Riquelme

El regreso del Barça al Camp Nou se produce en medio de varias dudas de peso respecto a la alineación que presente Van Gaal. En Mallorca no estuvieron ni Puyol ni Riquelme, ambos lesionados. Pero la dolencia del argentino fue vista con recelo porque fue mínima y se produjo a última hora, después de que en uno de los últimos entrenamientos previos el técnico alineara en el equipo presumiblemente titular a Iniesta en la teórica posición de Riquelme. Van Gaal alabó el juego que desplegó Iniesta en Mallorca, pero no se mostró del todo convencido del nivel exhibido por el joven jugador de la cantera, que recibió el alta médica el pasado jueves después de haber sufrido un golpe contra el equipo balear.

Overmars, que tuvo que retirarse del entrenamiento del pasado jueves a causa de unas molestias, está recuperado y podría mantenerse en el equipo titular. El perjudicado podría ser Saviola, que en Mallorca sólo actuó durante los últimos once minutos tras relevar al extremo holandés.

Mientras que Puyol desplazaría de la titularidad a Christanval, el lateral izquierdo podría ser ocupado por Motta. Después de la lesión sufrida por Navarro, esta demarcación es una de las que desea reforzar Van Gaal, aunque ayer explicó que, además de Motta, Cocu y Gabri también pueden ocupar el puesto. El técnico da prioridad a la contratación de un delantero que, según insinuó, podría tratarse de un jugador reserva en el equipo al que pertenece. En esa situación están, por ejemplo, Hasselbaink, del Chelsea, y Trezeguet, del Juventus.