Lorenzo Miguel, dirigente sindical argentino
Lorenzo Miguel, líder del otrora poderoso sindicato de los metalúrgicos de Argentina y considerado una figura clave en el Partido Justicialista (peronista), falleció ayer en una clínica privada de Buenos Aires, a los 75 años, por un paro cardiorrespiratorio. El dirigente sindical, quien por su habilidad negociadora supo ganarse los apodos de El Zorro y El Tejedor, fue hospitalizado hace una semana por complicaciones de una afección renal y un agudo proceso de diabetes que lo tenía prácticamente postrado desde hace dos años.
Miguel fue secretario general durante 32 años consecutivos de la Unión Obrera Metalúrgica y, aunque nunca encabezó formalmente la conducción de la CGT, la principal central obrera argentina, siempre fue quien tenía la palabra final a la hora de designar a la dirección de ese organismo sindical.
Nacido el 27 de marzo de 1927, logró construir, desde las sombras, un férreo poder que le permitió negociar tanto con gobiernos dictatoriales como constitucionales, colocar y destituir ministros de Trabajo e influir también en las pujas internas de los peronistas.
Poco amigo de las declaraciones y apariciones en los medios de comunicación, supo armar una red de lealtades y compromisos que lo convirtieron durante más de tres décadas en una persona influyente entre los poderosos y temido por quienes osaran enfrentarse a él.
Lorenzo Miguel, emblemático representante del sindicalismo burocrático, estuvo preso en 1976, cuando las Fuerzas Armadas instauraron por siete años una cruenta dictadura, y compartió la celda con el entonces gobernador de la provincia de La Rioja y luego presidente del país, Carlos Menem.-
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