Un aguacero inunda tres barrios de Huelva y causa desprendimientos en siete carreteras de la sierra

Una lluvia torrencial sembró ayer el caos en Huelva capital y en algunas localidades de la Sierra onubense entre las las 9.30 y las 10.30. Los bomberos de la capital tuvieron que realizar 22 salidas durante esa hora, la mayoría para achicar agua de algunas calles, que se convirtieron en ríos de más de medio metro en algunas zonas. En algún momento llegaron a caer 50 litros por metro cuadrado. En la capital, algunos vecinos de las tres barriadas del noroeste sufrieron inundaciones en sus casas y garajes. Las lluvias causaron desprendimientos de tierra en siete carreteras de la Sierra.

"De pronto se hizo de noche y comenzó un diluvio. El día había amanecido bien en Huelva, aunque algo húmedo. Mi patio se puso rápidamente con unos 40 centímeros de agua que he tenido que sacar con cubos", afirmaba ayer un vecino de la barriada de Pérez Cubillas, una de las más afectadas por el chaparrón

En torno a las 10.00, la calle Guadalquivir, en Pérez Cubillas, arrastraba medio metro de agua. Las ruedas de los automóviles estaban sepultadas por el líquido. Los vecinos, en un bar, criticaban la tardanza de los bomberos y el olvido del Ayuntamiento en arreglar los aliviaderos de la zona. Pero pudo ser peor. "No se produjeron grandes problemas en casas particulares. Las inundaciones han afectado, sobre todo, a las calles, porque no se ha absorbido todo el agua. Pero incluso ha habido suerte: A esa hora había bajamar, por lo que el agua se fue con mayor facilidad. La lluvia fue muy grande", explicó Francisco Huelva, director del Centro Provincial de Coordinación de Emergencias (Cecem)de la Junta.

"Una laguna"

El concejal de Urbanismo, Francisco Moro, del Partido Popular, recorrió la zona recogiendo las quejas de unos y otros. También hubo inundaciones en Los Rosales y en el Barrio Obrero. Además, los bomberos tuvieron que achicar agua del entorno del instituto de El Conquero, "que se había convertido en una auténtica laguna", según fuentes del Servicio de Extinción de Incendios. "Yo he sacado el agua fuera de mi casa. Se me ha anegado todo: La salita, la cocina y el cuarto de baño. Han venido muchos vecinos a ayudarme y gracias a ellos he podido sacar el agua fuera", explicó una vecina de Pérez Cubillas.

Los problemas también afectaron a varias localidades de la provincia onubense. Hubo que abrir los aliviaderos del pantano de Aracena, "que estaba a rebosar", según fuentes del Cecem. Además, por precaución, se cortó al tráfico durante dos horas la carretera que une Zufre con la mina. Y la lluvia provocó desprendimientos de tierra y caídas de ramas de árboles en siete carreteras de la provincia, entre ellas la nacional 431 (Huelva-Ayamonte) y la nacional 435 (Huelva-Extremadura). Los bomberos del Consorcio Provincial Contraincendios trabajaron durante unas cuatro horas para restablecer la normalidad.

El aguacero cogió por sorpresa incluso a los propios servicios de emergencia: el Instituto Nacional de Metereología levantó la situación de alerta por fuertes lluvias en la provincia onubense a las 20.00 del miércoles.