La Generalitat ofrece a Uni2 recomprarle por 50 millones la empresa al-pi
El Gobierno catalán sugiere, como alternativa, que ambos socios aporten 84 millones
El Gobierno catalán envió ayer por escrito al operador Uni2 (France Telecom) una propuesta para recomprarle, por un máximo de 50 millones de euros, el 75% que el socio francés controla en la empresa catalana de telecomunicaciones al-pi. Esta compañía es fruto de la mayor privatización realizada por la Generalitat, en 1999. En aquel momento de euforia, Uni2 desembolsó 78,13 millones de euros por al-pi, que ofrece servicios sólo a empresas. El Gobierno catalán mantiene el 25% de las acciones.
La oferta, que de acuerdo con fuentes de la Administración catalana demuestra el "compromiso de ésta con el futuro de al-pi" pese a la crisis del sector, se pone sobre la mesa tras unas semanas de infarto en las que ambos accionistas han intentado en vano alcanzar un acuerdo antes de mañana.
Para mañana está convocada una junta en la que, si no se cierra un pacto para ampliar el capital, la compañía corre el riesgo de disolverse, visto que las pérdidas acumuladas por al-pi superan sus recursos propios.
Fuentes próximas a las negociaciones habían indicado hace tres semanas que Uni2 (que siempre ha subrayado públicamente su apuesta por al-pi) estaba dispuesta a forzar la quiebra porque la Generalitat no quería aportar "dinero fresco", sino sólo capitalizar deuda. En un agotador cruce de acusaciones, la Generalitat replicaba que Uni2 quería volver a dejar la caja de al-pi vacía de fondos porque el dinero que se bombeara revertiría a los accionistas, no a al-pi.
Fuentes del Gobierno catalán admitieron ayer que, para Uni2, el precio ofrecido por la recompra es "insuficiente", pero añadieron que la capacidad de al-pi para generar negocio y la fuerte deuda de la empresa (115 millones de euros) convierten en "muy buena" la oferta porque "ningún inversor privado les daría tanto dinero".
Nunca revender la red
El escrito de la Generalitat contiene una alternativa a la recompra, tras la que el Gobierno catalán no vendería la infraestructura desplegada ya por al-pi (sólo volvería a dejar en manos privadas la gestión de la red, para lo que ha iniciado contactos informales).
Esta alternativa consiste en realizar una ampliación de capital por valor de 84 millones de euros. Hasta ahora, la inyección de dinero planteada era de 52 millones de euros, lo cual supone garantizar la viabilidad de la empresa.
Con esta propuesta, la Generalitat capitalizaría los 13 millones de deuda que le corresponden y Uni2, 39 millones de la suya (el resto lo recuperaría cuando el beneficio operativo de al-pi -Ebitda-) sea positivo. Todo este dinero se quedaría en al-pi. Pero, además, el Gobierno catalán aportaría adicionalmente dinero líquido (ocho millones) y Uni2 pondría 24 millones de euros más.
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