El teatro porteño abre el telón

El estreno en Madrid de 'Arte', con Ricardo Darín encabezando el cartel, inicia una temporada de espectáculos argentinos

Con la puesta en escena de Arte, la obra de Yasmina Reza que el inglés Mick Gordon estrenó hace ya cinco años en Buenos Aires y que protagonizan Ricardo Darín, Óscar Martínez y Germán Palacios, comienza el próximo 8 de enero en el teatro Infanta Isabel el desembarco de espectáculos argentinos en Madrid. Dos semanas después, el musical Tanguera inaugura la sala principal del nuevo teatro Alcalá. Tanguera, con casi cuarenta bailarines en escena y elegido en Argentina como el mejor espectáculo del año, resume la esencia del tango.

La adelantada fue Linda Peretz, protagonista del unipersonal No seré feliz pero tengo marido. Debutó el pasado 27 de noviembre en el teatro Muñoz Seca y, debido a la acogida favorable del público, extendió su ciclo, previsto inicialmente por cuatro semanas. La comedia Confesiones del pene, que lleva ya tres meses en el teatro Goya de Barcelona, se trasladará luego a Madrid. En la sala más pequeña del nuevo Alcalá se estrenará la celebrada Venecia, del argentino Jorge Accame, pero con elenco español.

Otro musical vinculado al tango, Glorias porteñas, encabezado por la actriz Soledad Villamil, hará una gira por Cataluña. Y en la lista de espera de las salas de Madrid se apuntan: Made in Lanús, Acaloradas, Una bestia en la Luna y Cuestiones con Ernesto Guevara.

Sólo el empresario argentino Alejandro Romay, que invirtió unos quince millones de euros en el Alcalá el año pasado, puede excluirse de las obvias razones de peso, o de euros, que estimulan el éxodo desde comienzos de 2002. La desbordante producción de Buenos Aires -donde se presentan unos doscientos espectáculos de todo tipo cada semana- no se correspondía tras el derrumbe económico con una cantidad cada vez más reducida de espectadores. Romay cree que habrá sitio para todos en Madrid, porque "hay una historia en común y un intercambio frecuente que casi no se ha interrumpido; el público español ama el teatro y tiene mucho cariño y respeto por los actores argentinos".

A comienzos de los años noventa, cuando la Ley de Convertibilidad imponía la paridad uno a uno del peso con el dólar, los actores españoles aprovecharon también la oportunidad económica que se les presentaba en Buenos Aires. Todavía se recuerda la memorable puesta de Una jornada particular con Charo López y José Sacristán en los papeles principales.

Carlos Rottemberg, marido de Linda Peretz y administrador de cinco salas teatrales en Buenos Aires, productor entre otros de Le Tricicle, La Zaranda, Nati Mistral, Alberto Closas y Charo López cuando se presentaron en Argentina, considera que no se trata de una salida transitoria para aliviar la crisis. En su opinión, "es probable que Madrid, Barcelona y otras ciudades españolas pasen a formar parte del circuito teatral porteño como si fueran capitales de provincias argentinas, se harán coproducciones y se integrarán elencos con actores de ambos países pensando en giras y en temporadas más extensas".

Las razones económicas de los empresarios levantan el ánimo de los actores argentinos, un gremio con un 90% de desempleo. Para Óscar Martínez, compañero de Darín en Arte, "es muy alentador el desafío de enfrentar otro público, otros críticos, de cambiar el aire, de vivir un par de meses fuera del país para verlo todo desde allí". Con Darín y Martínez, Arte es quizá el único éxito continuado de público en todo el país desde que se estrenó hace ya cinco años. Todavía continúa representándose a sala llena.