Roldán sale de prisión durante cuatro días gracias al tercer grado
Un guardaespaldas trató de evitar que se fotografiara al penado
Luis Roldán salió poco antes de las nueve de la mañana de ayer del Centro Penitenciario de Brieva, en la provincia de Ávila. El ex director general de la Guardia Civil disfruta de su primer puente, de cuatro días de duración, desde que se le ha concedido el régimen penitenciario de tercer grado con carácter restringido. Roldán ingresó en prisión hace casi ocho años, el 28 de febrero de 1995.
El paréntesis carcelario más amplio del que hasta ahora ha disfrutado el ex director general de la Guardia Civil se inició con una salida en coche de la prisión a gran velocidad. No obstante, se pudo ver al preso Roldán con un chaquetón marrón y corbata. Llevaba como equipaje una bolsa de viaje roja y una bolsa de plástico blanca.
La mañana era gélida, con temperatura por debajo de cero grados. Caían pequeños copos de nieve y los tejados estaban blancos. Roldán abandonó el recinto carcelario en un Seat Córdoba blanco, seguido por un Citroën AX gris metalizado.
Los dos automóviles tomaron la autopista A-51 hasta Villacastín (Segovia), donde en el peaje uno de los guardaespaldas que le acompañaban provocó un incidente con un fotógrafo. El reportero bajó del coche para fotografiar a Roldán, que intentó taparse el rostro con una gabardina. Entretanto, un guardaespaldas descendió del Citroën y empujó al fotógrafo contra una de las cabinas mientras le exigía que dejara de usar la cámara.
Roldán, que cumple condena de 31 años, ha conseguido el permiso después de que la junta de tratamiento de la prisión de mujeres, en la que está recluido por motivos de seguridad, le concediera autorización para salir el fin de semana. La prolongación hasta la noche del lunes se debe a que el día 9 es festivo en Castilla y León. El tercer grado restringido permitirá al ex director general de la Guardia Civil salir de prisión fines de semanas alternos y 48 días de permiso al año.
El tercer grado le fue concedido a Roldán por el juez de vigilancia penitenciaria de Valladolid, que desestimó un recurso de la fiscalía. El juzgado realizó inicialmente la concesión al haber obtenido el penado una oferta de trabajo de una empresa de promociones artísticas, que luego se le retiró. A la vista de esa nueva circunstancia, el juez decidió mantener el tercer grado, pero con carácter restringido, es decir, sin permitir que Roldán abandone la prisión todos los días y vuelva sólo para dormir.
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