El contrabando de tabaco costó 6.000 millones de euros a la UE en 2001

El fraude por contrabando de tabaco en la Unión Europea ascendió el año pasado a 6.000 millones de euros. Ésta fue la cantidad que los países miembros dejaron de ingresar por el comercio ilícito de tabaco. Un volumen equivalente a lo que recaudó España por impuestos del tabaco durante 2001. Los datos los ofreció ayer la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF), en un seminario organizado en Salamanca bajo el nombre de El papel de la comunicación en la lucha contra el fraude.

España ha reducido su volumen de fraude en el tabaco, al pasar del 17% al 1,5% del consumo total en 2001. También, el perjuicio económico descendió desde los 740 millones de euros de 2000 hasta los 95 aproximadamente de 2001.

En los 10 primeros meses del año, la Guardia Civil se ha incautado ya de 6,5 millones de cajetillas de contrabando. Lo aprehendido a lo largo de todo el año pasado ascendió a 12 millones de cajetillas, lo que indica que este año, previsiblemente, se producirá un descenso en esta partida.

La mayor parte del contrabando que desapareció de España se desplazó al Reino Unido, donde una de cada cinco cajetillas de tabaco vendidas procede del contrabando, según Gill Stevens, portavoz de las aduanas británicas. Entre 2000 y 2001, sólo en menudeo (incautaciones pequeñas) se evitó un fraude de 3.500 millones de libras (5.538 millones de euros), una cantidad que representa el 41% de todo el tráfico en el Reino Unido.

El motivo de la emigración del contrabando hacia ese país reside en el precio. Un paquete de tabaco vendido en las calles de Londres alcanza el precio de 10 euros, frente a los 0,5 euros que cuesta en origen. De este modo, el margen de beneficio es mayor que en España y los contrabandistas obtienen mayores ganancias.

Del volumen de contrabando que entra anualmente en la Unión Europea, el 30% procede de países de Oriente, fundamentalmente de China.

100.000 empleos

El tabaco aporta un gran número de empleos y de ingresos económicos a las arcas del Estado. Unos 100.000 trabajadores viven de esta actividad. Durante todo el año pasado se vendieron 1,3 billones de cigarrillos, lo que sumó ingresos de 8.670 millones de euros en consumo final. El Estado recibió más de 6.000 millones, ya que el 75% del precio del tabaco corresponde a impuestos. Además de la venta en estancos y otras superficies, en España hay instaladas entre 150.000 y 200.000 máquinas expendedoras.

En los últimos cuatro años, la Guardia Civil ha hecho aflorar fraudes por importe de 193 millones de euros y ha detenido a un total de 120 personas, según el responsable de la Unidad de Delitos Económicos y Patrimoniales.

Para luchar de forma más eficaz contra el contrabando de tabaco, una de las principales preocupaciones de la Unión Europea, el portavoz de la OLAF, Alessandro Botticé, propuso estudiar el nombramiento de un fiscal europeo para los delitos de fraude al Presupuesto y a los fondos de ayuda comunitarios. Este tipo de violaciones de la ley representan entre el 1,5% y el 5% del volumen presupuestario de la UE. Botticé se mostró partidario de contar con una buena red de comunicación y transparencia para atajar el fraude. Combatirlo es la principal misión de la OLAF, que integra a representantes de las policías fiscales de los países miembros.